La Acción Católica especializada busca “ocupar los espacios de la realidad social y existencial”

  • Los siete movimientos apostólicos se reúnen en Madrid para “seguir trabajando en un proyecto común”
  • “La Iglesia tiene que estar en salida, siendo promotora de una acción transformadora y liberadora”, recalcan

Reunión de la Acción Católica Especializada

Las comisiones permanentes de la Acción Católica especializada –Juventud Obrera Cristiana (JOC), Juventud Estudiante Católica (JEC), Profesionales Cristianos (PX), Movimiento Rural Cristiano (MRC), Movimiento de Jóvenes Rurales Cristianos (MJRC), la Fraternidad Cristiana de Personas con Discapacidad (FRATER) y la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC)– se han reunido este 2 y 3 de junio para “seguir trabajando en un proyecto común donde, partiendo de la especificidad de cada movimiento, poder seguir potenciando la misión de evangelizar en los ambientes”. Y es que “desde la Acción Católica especializada, entendemos la evangelización como un proceso que comienza engendrando un estilo de vida cristiana, enraizada en la revisión de vida y la actitud de estar en salida”, subrayan.

Según explican, a través de un comunicado, “estamos convencidos de que los creyentes debemos esforzarnos en interpretar teológicamente los rasgos del mundo actual para escuchar a través de ellos la voz de Dios”. Además, “para poder realizar una adecuada interpretación de ellos y obrar en consecuencia, como propone el papa Francisco en ‘Evangeli gaudium’, ‘es necesario escuchar los grupos humanos frecuentemente silenciados'”.

Método ‘Ver, Juzgar y Actuar’

La Acción Católica especializada, encarnada en las diferentes dimensiones de la vida de la persona, utiliza el método ‘Ver, Juzgar y Actuar’ como forma de hacer una lectura creyente y comprometida con el mundo y su transformación. El método trata de “analizar las causas y consecuencias de los hechos, uniendo fe y vida, para discernirlas desde el Evangelio de cara a un compromiso por la transformación del mundo, construyendo alternativas personales y colectivas que redunden en el cambio de las personas y de las estructuras”, explican.

Los siete movimientos han mostrado su convencimiento de que “la Iglesia tiene que estar en salida, siendo promotora de una acción transformadora y liberadora en este mundo, denunciando las injusticias y anunciando la Buena Noticia de Dios”. Porque “nuestra vocación es ocupar los espacios de la realidad social y existencial, para ofrecer la buena nueva del Evangelio que libera y salva, apostando siempre por la promoción integral de las personas”.

Asimismo, “nuestro ser Acción Católica, nos lleva a estar como levadura en la masa. Es decir, hacer descubrir a cada persona la misión que nos encomienda Dios, comprometiéndose a transmitir y anunciar la Buena Noticia allí por donde esté, por donde se mueva y con quien esté”. Y añaden: “Con estos procesos estamos dando luz a personas cristianas que se descubren llamadas y con ello responsables de este mundo, del ambiente donde viven, que luchan por unas condiciones de vida digna y colaboran en la construcción de una sociedad más justa, fraterna e igualitaria como bien nos enseña el estilo de vida de Jesús”.

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