El sacerdote César Cordero Moscoso, del Arzobispado de Cuenca (Ecuador), ha sido denunciado por abusos sexuales a menores. El pasado 22 de mayo declaró ante el clero por las acusaciones en su contra. Sus polémicas declaraciones han visto la luz. Y atacan a las supuestas víctimas y hasta al propio papa Francisco. “Aquel que quiere mantenerse íntegro no permite que el abuso tenga lugar”, afirmó durante el interrogatorio, como recoge Infobae.
El sacerdote cree que las denuncias por abusos “últimamente se han puesto muy de moda” y tiene “toda la impresión de que muchas personas, con el objetivo de obtener dinero, acusan a los sacerdotes de delitos tan graves”. En relación a las continuas peticiones de perdón por parte de Jorge Mario Bergoglio, el clérigo recalca que le llama “mucho la atención que el Papa descienda y se abaje de su dignidad de sucesor de Pedro y se ponga a la altura de unos malhechores pidiéndoles perdón”. Y añadió: “Tengo la impresión de que el Papa quiere congraciarse con los enemigos de la Iglesia”.
El pasado 30 de mayo, el arzobispado informó que Cordero Moscoso quedó suspendido después de que el perito de las investigaciones considerara “verosímiles las acusaciones”, y pidió perdón a las víctimas, personas y comunidades “que hubieran sido afectadas por los escándalos de clérigos”. Según los medios locales, los abusos habrían ocurrido hace 40 años.
“Valoramos la contribución que las escuelas católicas hacen a la Escocia moderna. Queremos que esa contribución continúe en los próximos años”. Así lo ha expresado la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, que ha añadido que su Gobierno es un “defensor inequívoco” de estas escuelas. Por eso, ha prometido 114.000 euros adicionales de financiación para el Programa de Formación del Profesorado Católico, lo que permitirá a 322 personas obtener un Certificado de Formación de Profesores Católicos –46 más que el último año–.
Sturgeon recordó que este año es el centenario de “la legislación que llevó a las escuelas católicas al sistema educativo estatal de Escocia. Desde ese momento, las escuelas católicas han hecho una gran contribución a la educación escocesa”. La primera ministra alabó la diversidad en las escuelas católicas, y citó ejemplos de las escuelas primarias Holy Cross y St Bride’s en Holyrood, donde “entre los alumnos se hablan más de treinta idiomas diferentes”.
La primera ministra cree que esta diversidad enfatiza que “educar a la gente de una manera que sea compatible con la fe católica y los valores católicos no los aísla, va de la mano con alentarlos y permitirles contribuir a su comunidad en general”, según indica The Tablet.
Zimbabwe espera elecciones presidenciales para el 30 de julio. Para contribuir a la campaña electoral, los líderes religiosos cristianos se reunieron en una conferencia titulada: ‘Los líderes religiosos apoyan el proceso de paz de Zimbabwe’. En ella se hizo presente la Conferencia Episcopal del país, con el objetivo de “mejorar la participación de la Iglesia en el proceso de paz a través de iniciativas como el diálogo, la mediación, la paz y la reconciliación que conducen a la transformación nacional con reflejos importantes en la colaboración con organismos como la Comisión Nacional de Paz y Reconciliación (NPRC), la Comisión de Derechos Humanos (ZHRC), la Comisión Electoral de Zimbabwe (ZEC) y la policía de la República de Zimbabwe (ZRP)”, como dijo Paul Muchena, coordinador nacional de la Comisión Episcopal de Justicia y Paz.
La importancia de los temas discutidos en la conferencia se ve subrayada por la consideración de que las anteriores elecciones en Zimbabwe siempre se han caracterizado por la violencia y la sangre. Entre otras cosas, los líderes religiosos hablaron sobre qué aspectos aprender de las experiencias de otros países de la región, como Sudáfrica, Burundi, Togo y Kenia, sobre cómo facilitar la paz y la reconciliación.
Rudolf Nyandoro, obispo de Gokwe y presidente de Justicia y Paz, ha advertido contra los peligros derivados de proferir declaraciones despectivas, expresiones de odio y consignas que dividen a la gente y, finalmente, conduzcan a la violencia o al derramamiento de sangre. Así, alentó a los partidos políticos a desistir de tales prácticas y elegir palabras que unan en lugar de dividir a las personas. “El que pronuncia consignas que desean la muerte de sus oponentes políticos debe recordar que de esta manera desea la muerte a Dios, porque todos han sido creados a su imagen”, advirtió, como apunta FIDES.