Los obispos de Honduras denuncian la protección de los corruptos “con leyes, decretos y sentencias hechas a medida”

La Conferencia Episcopal de Honduras ha emitido un comunicado con las conclusiones de su asamblea plenaria de junio en el que denuncian la situación del país cuando apenas quedan seis meses para las próximas elecciones generales. Particularmente muestran su preocupación por el empeoramiento de las condiciones de vida de los ciudadanos y su falta de confianza en las instituciones. Situación en la que “el diálogo es más bien escaso”, opinan los obispos.

Otro de los problemas que han destacado los mitrados es el de la corrupción, y el apoyo del Gobierno a quienes la protagonizan “con leyes, decretos y sentencias hechas a medida para proteger y garantizar impunidad a personas señaladas por la corrupción”. Así, según recoge Vatican News, apoyan “toda iniciativa ciudadana de lucha contra la corrupción”.

Finalmente se han solidarizado con Guatemala y Nicaragua por la catástrofe natural que sufre una y la social que sufre la otra, algo que han afirmado podría suceder también en Honduras si no hay pronto una  “verdadera conversión a los valores de la democracia”.

Los obispos congoleños denuncian el abandono del Estado

Los obispos de las diócesis de la provincia de Ecuador, en la República Democrática del Congo, han denunciado durante la última sesión plenaria de la Conferencia Episcopal el abandono que sufre su provincia con respecto al resto de la nación. “Ninguno de los grandes proyectos del Gobierno de Kinshasa repercuten en la sociedad local. Las carreteras están en un estado de ruina total y las estructuras sanitarias no pueden ofrecer la adecuada atención a la población”.

Así lo afirma el secretario ejecutivo de la Conferencia Episcopal provincial de Mbandaka, Gaspar Njoldi, en Agencia Fides, quien asegura que esto “es el resultado de una mala gobernabilidad, del abandono de la población por el Gobierno central y de la instrumentalización de la clase política local”. Asimismo, ha pedido en nombre de los obispos ayuda al Gobierno, ya que la Iglesia continúa atendiendo a los necesitados, pero los funcionarios provinciales y nacionales también deben “dar lo mejor de sí mismos”, recordando que incluso han suspendido unas ordenaciones sacerdotales por un brote de ébola. “La autoridad del Estado debe ser restaurada a través de varios organismos locales. Solo de esta manera la provincia será habitable”, ha sentenciado Njoldi.

La Archidiócesis de St. Paul pagará 180 millones a víctimas

La Archidiócesis de St. Paul y Minneapolis, en Minnesota, ha iniciado un plan financiero para pagar su parte de la indemnización de casi 180 millones de euros que percibirán 450 víctimas de abusos por parte del clero. La suma que deberá pagar la archidiócesis ronda los 34 millones de euros, el resto lo cubrirán compañías de seguros.

La archidiócesis abrió por mandato judicial en 2013 un periodo de tres años para que las víctimas demandaran por daños y perjuicios a la misma, y antes de que acabara el plazo, en 2015, tuvo que declararse en bancarrota, por lo que no resultará fácil recaudar el dinero. El plan de recaudación, que por ahora ha conseguido unos 7 millones en ventas de tierras y activos, pasa por deshacerse de propiedades por un valor 4 millones y conseguir 3 millones en donaciones voluntarias.

También habrá recortes en los seguros médicos de los empleados, se utilizará el dinero de los fondos para seguros de las parroquias y 7 millones de cuentas no restringidas y fondos de designación de la junta, según recoge Crux.

En resumen, la archidiócesis utilizará todos sus recursos para sufragar las indemnizaciones, aunque también hará todo lo que pueda para no tener que despedir a ningún empleado, según dijo el arzobispo Bernard Hebda. En cuanto al abogado de las víctimas, Jeff Anderson, asegura que el dinero irá a parar a un fondo que se repartirá entre las víctimas, si bien aún no se ha determinado la cantidad que percibirá cada una de ellas.