Scholas Occurrentes da el salto al país más pobre de América. “En julio viajarán a Haití para quedarse definitivamente un grupo de laicos porque nos dimos cuenta que la ayuda no llegaba y que tanto estudiantes como docentes estaban perdiendo la esperanza”. Así lo anunció ayer, 28 de junio, José María del Corral, presidente de la fundación impulsada por el papa Francisco que hasta hoy reúne en Castel Gandolfo en el IV Congreso de la Cátedra Scholas a docentes y jóvenes pertenecientes a 71 universidades públicas, privadas, de diversas confesiones religiosas y laicas, de más de 30 países de los cinco continentes.
Durante un encuentro con la prensa en la Sala Stampa de la Santa Sede, Del Corral explicó que “no bastaba con ir a Haití, hacer una actividad y volverse. Vamos para quedarnos”. Este nuevo proyecto buscará aplicar el modelo pedagógico que ya está en marcha en 190 países.
“Scholas tiene una vocación específica para trabajar desde estas periferias, para conectar con los jóvenes”, valoró el arzobispo secretario de la Congregación para la Educación Católica, Angelo Vincenzo Zani, que adelantó que el próximo de la revista del “ministerio” vaticano profundiza en la metodología utilizada por la entidad en la que prima “la educación informal fuera del aula a través de la música, el arte y la tecnología”.
El valor del deporte
“Los chicos están pidiendo una escuela que tenga que ver con la vida, que les dé sentido, no solo busca que les proporcione un trabajo porque lamentablemente saben que no lo van a encontrar”, completó Del Corral, que apuntó cómo “también venimos trabajando a través a través del deporte, por ejemplo, a través de boxeo, como única alternativa a la droga, la delincuencia, la calle y la muerte. Tenemos un Papa futbolero, en el sentido de que él sabe el valor educativo y cultural que tiene”.
Esta mirada es la que ha empapado también el congreso que estos días acoge Castelgandolfo, tal y como reafirmó el profesor de la Universidad LUMSA de Roma, Italo Fiorin: “La educación es un instrumento de transformación de la realidad, siempre y cuando nazca de un proyecto de reciprocidad, algo en lo que coincidimos creyentes y no creyentes”.
Para el docente de la Fordham University de Nueva York, Gerald Cattaro, el reto que se encuentran las universidades pasa por “transformar la pedagogía para que sea más inclusiva y transversal”.