Más de 500 menores de familias con escasos recursos económicos están disfrutando de las actividades de ocio y tiempo libre que les ofrece la Fundación Iniciativa Solidaria Ángel Tomás (FISAT), de los salesianos de Valencia.
Los niños y jóvenes en riesgo de exclusión social son de la Comunidad Valenciana y Cartagena y pertenecen a los centros de día, casas de acogida, centros de apoyo educativo y pisos de emancipación coordinados por la fundación salesiana.
En agosto comienzan los campamentos de verano de Elche y Cartagena, donde “se trabaja el tema de la convivencia, alimentación, autonomía de los jóvenes, la convivencia fuera de su entorno familiar y habitual”, explica a Vida Nueva Joana Monzó, técnico de comunicación de la Fundación.
El equipo de voluntariado lo forman alrededor de 150 personas. “Todos los voluntarios que están en las actividades de verano y en los campamentos han recibido formación a lo largo del año, no les contratamos puntualmente, por lo que ya conocen a muchos de los chavales que van”, destaca Monzó.
Este año, para los más mayores, a la oferta del Camino de Santiago se ha unido por primera vez “la ‘Don Bosco Challenge’, en la que los peregrinos han visitado las ciudades más significativas por las que pasó Don Bosco hasta llegar a Turín. Los participantes han gestionado toda la logística: dónde dormían, qué iban a visitar, han trabajado en actividades de recaudación…”, señala Monzó. Con todas estas gestiones previas “se trabaja la autonomía de los chavales que es muy importante para mejorar su autoestima, entre otras cosas”, recalca.