Con 38 votos en contra y 31, a favor, el Senado de Argentina tumbó la reforma legislativa que buscaba despenalizar el aborto en el país. Tras unos meses de intenso debate político y social se da por cerrada la cuestión, al menos, durante un año. Ante este hecho, los obispos argentinos han hecho público un comunicado en el que llaman a anunciar a partir de ahora “con más claridad el valor de la vida”. Firmado por la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina, con Oscar Ojea al frente como presidente, reconocen que “como Iglesia hemos participado del debate procurando un diálogo iluminador sin considerar enemigos a quienes pensaran distinto”.
“Como sociedad argentina nos toca ahora asumir y trabajar las nuevas divisiones surgidas entre nosotros a partir de este proyecto, a través de un renovado ejercicio del diálogo”, señalan los prelados que invitan a “prolongar estos meses de debate y propuestas en la concreción del compromiso social necesario para estar cercanos a toda vida vulnerable”.
Así, entre las iniciativas que plantea el Episcopado argentino se encuentra promover “la educación sexual responsable, el acompañamiento a los hogares maternales surgidos especialmente en nuestros barrios más humildes para acompañar a mujeres embarazadas en situaciones de vulnerabilidad y la atención a personas que han pasado por el drama del aborto”.
De esta manera, el Episcopado, lejos de dar por cerrada la campaña #ValeTodaVida que han encabezado en los últimos meses, se muestran partidarios de renovarla con el “entusiasmo y convicción” que lo hicieron “el 8 de julio pasado a los pies de Nuestra Señora de Luján: Que nuestra Madre nos ayude y enseñe a respetar la vida, cuidarla, defenderla y servirla”.
En este sentido, hacen un llamamiento a las demás confesiones religiosas para que se sumen a este trabajo, conscientes de que “el diálogo ecuménico e interreligioso ha crecido en este tiempo aunando esfuerzos para proteger la vida desde la concepción hasta la muerte natural”.
Por último, los pastores argentinos muestran su agradecimiento “a tantos hombres y mujeres, a los Senadores y organismos e instituciones que se han pronunciado en defensa de la vida”. Así, hacen especial hincapié en su acción de gracias al “testimonio de los pobres, que siempre nos enseñan a recibir la vida como viene y a saber cuidarla porque es un don de Dios”.