Braulio Rodríguez recuerda que la cultura de lo efímero “hace mucho daño”

El arzobispo de Toledo y primado de España, Braulio Rodríguez, ha celebrado este miércoles 15 de agosto la misa de la Virgen del Sagrario, Patrona de la ciudad, en la catedral primada. Durante la homilía, ha criticado la “cultura de lo efímero” a la que tan acostumbrados estamos hoy en día. Así, y aprovechando que es la Fiesta de la Asunción en la que la Virgen María fue asunta al cielo en cuerpo y alma, ha recordado que “nuestros cuerpos están llamados a resucitar algún día, no ahora, pero sí al final de los tiempos”.

Pero la muerte, algo inexorable, es algo en lo que no nos gusta pensar. “Ya tendremos tiempo de pensar en el cielo. Es la vida de ahora la que nos interesa vivir en cada día, el fin de semana, las vacaciones o en lo que nos busquemos”, ha criticado el mitrado. Un pensamiento que, defiende, “nos hace mucho daño y no trae la esperanza, solo el goce inmediato, de modo que no logramos experimentar el consuelo (…) y nos falta la confianza en el Señor”.

Así, según informa Europa Press, el prelado ha recomendado fijarse en la Virgen María, quien “nos indica que para secundar el amor de Dios hay que elegir la espera en el camino de la verdad, no ese salto a la fama que tantos esperamos conseguir ya mismo”. Asimismo, ha pedido a todos ser portadores de alegría para los demás, como lo es la virgen “pero de la alegría del Evangelio, que no es pasajera“, ha concluido.

Una víctima denuncia a Ezzati y Errázuriz

Una de las víctimas del sacerdote chileno Jorge Laplagne ha denunciado civilmente a este cura por presuntos abusos cometidos hace 13 años, cuando la víctima era menor de edad. Además ha denunciado a los cardenales Ezzati y Errázuriz por haber encubierto al sacerdote, ya que habría acudido al arzobispado de Santiago para denunciar los hechos en 2010 y, según afirma su abogado al portal Cooperativa, “pasaron los años y no se hizo absolutamente nada en torno a esta investigación que era muy fácil de comprobar y que daba cuenta de delitos graves”.

Por ello, el letrado opina que “esto involucra al cardenal Errázuriz y al cardenal Ezzati” directamente. Sin embargo, el arzobispado informó en una nota de prensa hace unos meses de que se había abierto dicha investigación contra el presunto abusador, pero “no se pudo demostrar la verosimilitud de los hechos”. El pasado junio se reabrió la investigación del arzobispado y el sacerdote quedó apartado de su parroquia a la espera de conclusiones. A pesar de ello, parece que la víctima continuará con el proceso civil contra él y los cardenales.

El arzobispo de Detroit se planta frente a los abusos

En las últimas semanas han aflorado las investigaciones a sacerdotes acusados de abusos en Estados Unidos, especialmente en el Estado de Pensilvania, y de igual forma ha resonado el caso del excardenal McCarrick. En medio de esta vorágine de acusaciones contra religiosos, el arzobispo de Detroit, Allen Vigneron, ha alzado la voz para hablar claramente sobre ello. Así, ha afirmado sin tapujos que “los sacerdotes con doble vida deben abandonar inmediatamente la Iglesia, o deben pedir perdón y arrepentirse”.

Ha sido en una carta publicada en la web del arzobispado en la que reflexiona acerca de la importancia del celibato para los sacerdotes, en cuanto que es algo que se asume como responsabilidad de forma libre, nadie está obligado a ser sacerdote y, por tanto, célibe. Es claro al decir que “no hay lugar entre nosotros para los sacerdotes que tienen una doble vida y engañan a la Iglesia con relaciones impuras, que no concuerdan con la promesa del celibato”.

También subraya la importancia de que los obispos estén al tanto de lo que ocurre en sus diócesis, y se reúnan con las víctimas para apoyar y entender la situación, de forma que las investigaciones sean eficaces y lo más rápidas posible. Finalmente expresa su apoyo personal y el de la diócesis a las acciones de investigación y prevención, con las que recientemente se ha comprometido el presidente de la USCCB, el cardenal Daniel DiNardo, tras el caso del ex-cardenal McCarrick.