Tras el aumento de denuncias en los últimos años de hijos no reconocidos de sacerdotes en Kenia, una asociación privada ha comenzado una campaña en colaboración con una agencia de ADN para identificar a estos curas. Para ello, han pedido a todas las mujeres que afirman tener hijos de religiosos que posteriormente las abandonaron que se sometan a una prueba de paternidad totalmente gratuita.
Se busca así comprobar si las denuncias son reales, y tomar las medidas necesarias en su caso. La asociación católica que hay tras la campaña, cuyo nombre no se conoce, ha anunciado a través de la agencia DNA Testing Services que elaborará un informe con el resultado de las pruebas. Según informa el portal La Estrella de Panamá, dicho informe será entregado directamente al Vaticano, para que decida qué medidas tomar.
La Conferencia Episcopal de Camerún ha publicado una carta dirigida a todos los ciudadanos en la que pide votar “a candidatos capaces de hacer frente a la crisis sociopolítica” que atraviesa el país, así como de “promover la unidad”. Sin señalar a ningún candidato en concreto, piden votar programas políticos que “ofrezcan soluciones reales a los problemas a los que nos enfrentamos”.
Estos problemas no son pocos, y la carta, firmada por el presidente de la Conferencia, Samuel Kleda, enumera algunos de ellos, como “la corrupción, pérdida del sentido del bien común, la crisis en partes del noroeste y suroeste, la desigualdad social, el desempleo juvenil, la lucha contra Boko Haram, los desafíos del mundo judicial, la salud, la educación, las infraestructuras, etc”.
Según recoge VOA, los mitrados insisten además en que todo ciudadano debe poder “ejercer su soberanía eligiendo libre, pacífica y responsablemente a sus líderes”. Para ello, llama a los candidatos y al actual gobierno a facilitar la celebración de unas “elecciones libres y transparentes”.
La capital de Irak acoge desde 1921 una escuela católica femenina llamada Al Aqueeda -que se traduce como ‘Fe’- en la que estudió de niña la arquitecta cristiana Zaha Hadid. En los últimos días, ha trascendido la noticia de que tanto el edificio como la capilla que lo acompaña -consideradas patrimonio arquitectónico nacional- van a ser demolidos para dejar sitio a un centro comercial de nueva construcción. Es por ello que multitud de cristianos iraquíes se están sumando a una petición por internet para que la asociación propietaria del inmueble cambie de parecer.
Según informa FIDES, el edificio es propiedad de una asociación cristiana que ha solicitado un permiso de demolición al ayuntamiento porque “la comunidad cristiana local ya no está interesada” en el mismo, debido a que se ha trasladado en su mayoría a otros barrios de la ciudad. Por ahora, el ayuntamiento ha paralizado los trámites a la espera de una decisión firme de la asociación.