El coliseo deportivo Roberto Durán en la ciudad de Panamá acogerá este domingo a centenares de niños en el evento “JMJ Kids”, al que ha convocado el arzobispo José Domingo Ulloa Mendieta, en el marco de la Solemnidad de Santa María la Antigua, patrona de ese país centroamericano.
El evento –que forma parte de las actividades que la Iglesia panameña ha venido realizando a lo largo de los últimos meses– busca acercar a los pequeños participantes a través de actividades lúdicas a lo que será la Jornada Mundial de la Juventud 2019, que se celebrará en esa nación del 22 al 27 de enero. La celebración eucarística será presidida por el propio Arzobispo de Panamá.
Al encuentro de Jesús
Por otra parte, en una entrevista concedida a Vatican News, el arzobispo Ulloa aseguró que las familias que recibirán a los jóvenes peregrinos que participarán en la JMJ se están preparando espiritualmente para dar lo mejor de sí, para descubrir “al mismo Jesús en cada peregrino que acojan en sus casas” durante el encuentro.
Aseguró que los panameños saben “que se van a enriquecer y van a enriquecer a los hermanos” participantes. “Lo que está en esta espera dichosa es el poder compartir realmente las mismas ilusiones, los mismos sueños, y ver que es posible seguir soñando con un mundo y una Iglesia nueva”, dijo.
José Domingo Ulloa dijo que independientemente de la infraestructura que ya se tiene para recibir a los miles de peregrinos de los cinco continentes, “lo más importante hasta la llegada de la Jornada es que el pueblo se va preparando de manera espiritual, teniendo un encuentro con Jesús, descubriendo lo que somos como Iglesia y qué es lo que podemos entonces ofrecer a tantos hermanos que vienen a congregarse en Panamá durante los días de esta jornada”.
En ese sentido, explicó que la preparación pone énfasis en tres grandes ejes: descubrir la importancia de preservar y cuidar la Casa Común, la presencia de María en la vida del país y el discernimiento de lo que Dios quiere de cada uno de los panameños.
Una iglesia lastimada pero alegre
En relación con los aportes de la JMJ-2019 al mundo, Ulloa dijo que si bien se trata de una Iglesia que ha vivido en el martirio y en el sufrimiento, quiere contagiar su alegría a todos los visitantes. Como exponente máximo del martirio –dijo– “tenemos a monseñor Óscar Arnulfo Romero, que ya no sólo pertenece a El Salvador o a Centroamérica, sino que pertenece y es ejemplo para toda la Iglesia universal”.
Desde esta realidad, la Iglesia panameña quiere ofrecer a los peregrinos “sencillez, alegría y confianza; podemos también compartir a los jóvenes que vienen de diversos continentes, cuál ha sido el caminar de esta Iglesia centroamericana”.
El Arzobispo de Panamá se reunió en días pasados en Roma con el Prefecto del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, Paolo Ruffini, así como con la comisión organizadora de la JMJ.
Cabe mencionar que la semana pasada, la prelatura de Bocas del Toro en ese país recibió los Símbolos de la JMJ que regresaron a Panamá luego de un año de caminar por Estados Unidos, México, Centroamérica y el Caribe.
