Cada viernes, Vida Nueva te acerca sus recomendaciones en pantalla grande (o no tanto)
En 1968, Donald Crowhurst, un veterano de la Real Fuerza Aérea Británica y navegante aficionado, decidió hipotecar su casa para poder participar en la Sunday Times Golden Globe Race, una regata de veleros en solitario y sin escalas alrededor del mundo.
Un intento más que discutible de salvar su negocio y, de paso, a su familia. En tierra, mientras tanto, su mujer y mayor defensora se enfrentaría a un desafío no menos arriesgado: seguir adelante con sus hijos y sin el amor de su vida.
Amante de las historias reales y un punto imposibles, el británico James Marsh –a quien debemos el documental ‘Man on Wire’, sobre el funambulista que se asomó al vacío entre las Torres Gemelas, o que narró la lucha contra sí mismo del astrofísico Stephen Hawking en ‘La teoría del todo’– recrea el épico y trágico periplo de este inconsciente. Una aventura en alta mar plagada de obstáculos y condenada al fracaso.
La pareja Colin Firth-Rachel Weisz constituye el principal salvavidas de una cinta que sortea con habilidad el naufragio de este sueño convertido en pesadilla. ¿Una gran mentira? ¿Un gran misterio?… En todo caso, una vida muy cinematográfica.
Sexta entrega de las aventuras del incombustible Ethan Hunt y su equipo de la Fuerza de Misiones Imposibles (IMF), con un cincuentón en plena forma (Tom Cruise), dispuesto de nuevo a desafiar la ley de la gravedad y en busca del más difícil todavía.
Más de dos décadas después de que Brian De Palma trasladara a la gran pantalla la popular serie televisiva, Christopher McQuarrie repite en la dirección tras su estreno en la saga con ‘Nación secreta’ (2015). Eso sí, producido por J. J. Abrams, el mismo que le cedió el testigo detrás de la cámara y a quien debemos en buena parte la construcción de un universo narrativo tan fácilmente identificable.
Hemos visto a nuestro intrépido agente secreto descolgarse del techo de la CIA, escalar montañas y rascacielos, amarrarse al ala de un Airbus en pleno despegue… Y ahora le toca ¡saltar desde 8.000 metros de altura! Pero no todo son peleas, persecuciones y explosiones. La adrenalina de las situaciones límite deja espacio también a los sentimientos del héroe.
La monumental París, una acción trepidante y el oficio del protagonista nos garantizan cerca de dos horas y media de puro espectáculo.
El intercambio de alegatos de una pareja en trámites de divorcio, por boca de sus abogadas, es solo el prólogo judicial a una historia familiar con aires de ‘thriller’, cercana por momentos a una cinta de terror.
¿Puede un marido maltratador ser un buen padre? La ópera prima de Xavier Legrand se asoma con mirada sensible y madura a uno de los problemas más preocupantes de nuestras sociedades: la violencia contra las mujeres, pero también cómo afecta a los más pequeños de la casa esa tensión diaria fraguada en el acoso, las amenazas y los golpes.
Haciendo gala de una extraordinaria economía narrativa, el realizador francés deja que sean los ojos de sus intérpretes los que hablen por sí solos, que el silencio incómodo o los sonidos más cotidianos sean su mejor banda sonora. El resultado es una atmósfera opresiva a punto de estallar, que tensiona y sobrecoge al espectador tanto como a los propios personajes.
Valentía, realismo y actualidad confluyen en una película imprescindible para comprender la gravedad de un fenómeno que nos interpela a todos. A estas alturas del año, ya podemos reconocer sin reparos que estamos ante uno de los títulos de 2018.