En una nueva acción coordinada a cargo del Fiscal Regional de Rancagua, Emiliano Arias, fueron allanadas simultáneamente las dependencias de los obispados de Valparaíso, Chillán, Concepción y Osorno de donde los policías incautaron documentación digital y en papel. Todo lo requerido les fue entregado con buena disposición de colaboración con la justicia, según informó en declaración pública el obispado de Valparaíso.
La Fiscalía busca disponer de las denuncias recibidas en los obispados que no han sido llevadas a la justicia civil. Esta búsqueda está siendo cada vez más exhaustiva ya que pocos días antes la policía, con orden judicial, incautó todos los correos electrónicos de varios años correspondientes al cardenal Ricardo Ezzati, a los obispos Fernando Ramos y Santiago Silva y a dos sacerdotes vinculados con causas judiciales canónicas.
En Osorno la policía, después de allanar el obispado, llegó hasta la residencia del obispo donde también incautó documentación.
La información recabada desde la documentación incautada en allanamientos que ya suman 8 obispados, la sede de la Conferencia Episcopal y varios colegios, sirve a la Fiscalía para llamar a declarar a obispos, sacerdotes y laicos, algunos en calidad de testigos y varios en calidad de imputados.
El cardenal Ricardo Ezzati, quien fue arzobispo de Concepción, es investigado por su presunto encubrimiento en casos de abusos en esa ciudad. El persecutor a cargo del allanamiento, Sergio Moya, dijo que se recogió evidencia sobre ese punto. “El señor Ezzati está citado en calidad de imputado para octubre y parte de las indagatorias que hemos realizado acá dicen relación con dichos cargos”, manifestó Moya. Con Ezzati está citado a declarar el actual obispo castrense y presidente de la Conferencia Episcopal, Santiago Silva.
También el arzobispo emérito de Antofagasta, Pablo Lizama, fue citado a declarar por denuncias contra capellanes castrenses hechas en el período que él fue obispo castrense.
Según publica un diario de cobertura nacional, la Fiscalía ha anunciado también que hay denuncias nuevas de abuso sexual contra el obispo de San Felipe, Cristián Contreras, hechas hace sólo dos meses y que corresponden a hechos ocurridos hace más de 10 años según el denunciante. En declaración pública el Obispado de San Felipe dice que “el obispo solo conoce la existencia de dicha investigación por la mencionada publicación periodística” y que él “manifiesta su tranquilidad ante la certeza de no estar involucrado en los hechos mencionados en la publicación”.
La acumulación de causas en la justicia civil involucra a 7 obispos imputados por delitos de abusos o de encubrimiento, además de otros 4 que están entregando declaración citados por la Fiscalía como testigos.
La Fiscalía Nacional ha centralizado todas las causas de presuntos delitos de abusos sexuales contra menores cometidos por sacerdotes en el Fiscal Regional de Rancagua, Emiliano Arias, quien coordina las acciones en todo el país y recolecta información de cuyo análisis surgen nuevas investigaciones. Fuentes de la Fiscalía han expresado que los allanamientos han permitido llegar a identificar la existencia de ilícitos de connotación sexual que se habrían cometido contra menores de edad y de presunto encubrimiento por parte de obispos y sacerdotes. Sesenta personas investigadas y más de 200 víctimas estarían involucradas en estos procesos. Para probar todo esto con argumentos sólidos, siguen los allanamientos en los que se incauta nueva documentación.