El arzobispo de Nueva York, Timothy Dolan, ha sido entrevistado por CNN, donde declaró que los últimos casos de abusos sexuales por parte de sacerdotes han sido “nauseabundos y diabólicos”.
Cuestionado también por la publicación del exnuncio Viganò en la que acusaba a Francisco de conocer y ocultar los escándalos por abusos del excardenal Theodore McCarrick, Dolan es claro: “Tomo en serio las palabras de Viganò y confío en que Francisco responda de manera apropiada”.
El arzobispo se posicionó a favor del cardenal de Washington, Donald Wuerl, criticado por su manejo de los casos de abuso sexual cuando era obispo de Pittsburgh, y que ahora se enfrenta a numerosas voces que le piden que renuncie. “La Iglesia le necesita para implementar las reformas prometidas. Wuerl es un líder entre los obispos”.
Una víctima alemana afirma que el informe que ha destapado casi 4.000 casos es “solo la punta del iceberg”
El diario El País entrevista a Matthias Katsch, una de las primeras víctimas que se atrevió a hablar de los abusos que sufrió en un colegio católico de Berlín. La Conferencia Episcopal alemana encargó una investigación sobre los hechos ocurridos en el colegio Canisius y por otros sacerdotes alemanes, cuyos resultados se filtraron a la prensa conociéndose la escandalosa cifra de 3.677 menores abusados en los últimos 70 años en Alemania.
Cifra que es menor de lo que realmente ocurrió, ya que hay muchos casos donde la información se destruyó: “El informe no permite tener una imagen completa, se incluyen las parroquias, pero faltan otras instituciones de las órdenes religiosas como los colegios o los seminarios. Casos como el mío por ejemplo no están incluidos”, señaló Katsch.
El Papa ha convocado a los presidentes de las Conferencias Episcopales para abordar el tema de los abusos en febrero, “Sí, es una oportunidad, pero la podía aprovechar para convocar también a un par de víctimas de cada país. Nosotros somos los que de verdad conocemos qué estrategias utilizan y qué necesitan las víctimas. Ahora sabemos que es una estructura de abusos y de encubrimiento sistemático”.
Los obispos filipinos se desmarcan de la presunta trama de derrocamiento del presidente Duterte
Jerome Secillano, secretario ejecutivo del Comité de Asuntos Públicos de la Conferencia Episcopal de Filipinas, ha respondido a los comentarios que acusan a los obispos de formar parte de un plan de desestabilización contra el presidente Rodrigo Duterte.
“No estoy en la comunidad de inteligencia, no puedo decir si realmente existe ese plan, pero sí puedo aclarar que la Iglesia no está en eso”, señaló el sacerdote añadiendo que “Duterte no debería tratar a los líderes de la Iglesia como enemigos porque pueden ser socios en la búsqueda de lo que es bueno para la gente”.
