Un intenso programa desarrolló en Santiago de Chile el secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada, arzobispo José Rodríguez Carballo, ofm. Durante cuatro días participó en actividades organizadas por la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile (CONFERRE) con diversos públicos. En el Aula Magna de la Pontificia Universidad Católica de Chile más de 200 participantes escucharon su reflexión centrada principalmente en la pastoral vocacional y las exigencias que requiere de quienes están consagrados. “Hay que invertir en la formación”, fue una de sus ideas centrales, complementada con que “no se puede permitir la mediocridad”. Esta conferencia estaba dirigida a todos los consagrados.
En el mismo acto Rodríguez Carballo presentó el libro ‘Una Vida Religiosa Humanizadora, ser auténticamente humanos’, que tiene como uno de sus autores al marianista José Maria Arnaiz, sm.
Otra actividad también a cargo de CONFERRE tuvo lugar con los formadores y formadoras de la mayoría de las congregaciones religiosas en Chile. En esta oportunidad abordó los diversos planes de formación y los participantes pudieron conocer los principales desafíos que implica esta importante etapa de la vida consagrada. Un trabajo en grupos permitió formular preguntas y situaciones especiales a monseñor Rodríguez.
En su encuentro con superiores y superioras provinciales, el secretario de la Congregación para la Vida Consagrada, en primer lugar, hizo llegar el saludo del papa Francisco a quienes participaron del encuentro y, luego, manifestó su dolor y cercanía con la vida religiosa de Chile y la Iglesia, en el contexto en que se encuentra: “Estamos viviendo un tiempo complejo y difícil; sin embargo, es momento de unirse, encontrarse y animarse mutuamente”, confesó. Aquí pudo abordar temas delicados y profundizar en los criterios para hacerles frente.
Una de sus primeras actividades en el país fue la reunión con una delegación representativa de obispos en la sede de la Conferencia Episcopal.
Trayectoria de formador
El arzobispo Rodríguez Carballo nació en Orense, Galicia, España, en 1953. Inició su noviciado en la Orden de Frailes Menores, en julio de 1970, e hizo sus primeros votos el 9 de agosto de 1971. El 1 de enero de 1976 realizó la profesión solemne en Jerusalén, y fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1977.
En su orden franciscana ha sido secretario general para la Formación y los Estudios, ministro de la Provincia de Santiago de Compostela, en España, presidente de la Unión de los Frailes Menores de Europa y maestro de los religiosos en período de formación. Ha sido elegido ministro general de su Orden en dos períodos.
En abril de 2013 el papa Francisco lo designó secretario de la Congregación para la Vida Consagrada y en mayo de ese año es consagrado arzobispo de Belcastro. Es licenciado en Sagrada Escritura por el Instituto Bíblico de Roma y en Teología Bíblica en el Studium Biblicum Franciscanum de Jerusalén. Ha ejercido de profesor en el Seminario Mayor de Vigo y en la Facultad de Teología de Santiago de Compostela, España. Una trayectoria de formador que avala su actual servicio a la Iglesia mundial.