Día de la Merced. 24 de septiembre. La patrona de las instituciones penitenciarias está de celebración. Momento clave del año para recordar la labor que la pastoral penitenciaria realizada en las 82 prisiones españolas. Un total de 809.766 euros aportó la pastoral penitenciaria en 2017, lo que supone 13,57 euros por interno, según los datos hechos públicos hoy por el departamento de Pastoral Penitenciaria de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Española.
“Quiero presentar vida, y quiero presentar compromiso. Un compromiso eclesial con nuestros hermanos privados de libertad. Los datos que a continuación aparecen son más que números, más que actuaciones, son personas entregadas y consagradas para que otras alcancen el sueño de la libertad. Son muchos capellanes, voluntarios y también profesionales que ponen al servicio de la pastoral sus posibilidades, sus recursos, sus cualidades. Son internos que responden a la confianza que se les concede en un permiso, en una actividad. Los datos sin rostros, son datos vacíos. Los datos con rostros, con contenido, con nombres son datos de vida y datos de esperanza”, explicó el director del departamento, Florencio Roselló.
Hay tres aspectos que Roselló ha querido destacar: “la gran riqueza humana comprometida con la cárcel y su entorno”, “el gran número de internos que llega a nuestra pastoral” y “los medios invertidos por la Iglesia”. Y es que esta pastoral es posible gracias al empeño de 162 capellanes (50 a tiempo completo, 84 a media jornada y 28 voluntarios de apoyo), 708 entidades (parroquias, Cáritas, congregaciones y ONG) y 2.700 voluntarios que “trabajan por crear espacios de libertad y esperanza dentro y fuera de la prisión”, lo que significa “un compromiso positivo tanto de la sociedad como de la propia Iglesia”, destacó el religioso mercedario.
993 programas dentro y fuera de prisión
Los datos recogidos, aportados a través de unos cuestionarios, son posible gracias a las respuestas de los internos de 78 de las 82 prisiones de nuestro país. Es decir, casi el 99% de los 59.664 presos españoles han contestado. De ellos, más de 7.000 participan en las celebraciones, 16.500 se benefician de los programas asistenciales: 10.000 recibieron paquetes de ropa y 6.500 el peculio. Así, de los que participan en los programas de reinserción, 3.447 recibieron permisos de acogida en las 70 casas disponibles y 834 realizaron trabajos por la comunidad. Y esta es solo una muestra de los 993 programas llevados a cabo dentro y fuera de prisión.
Los medios invertidos no son solo económicos, superando el pasado año la cantidad de 800.000 euros. Se trata también de “los medios humanos que hacen de nuestra pastoral la más numerosa en miembros interviniendo en las prisiones españolas”. Unos datos que demuestran que “la Iglesia está comprometida con la persona privada de liberta, con aquellos que están en situación de riesgo social en la calle, y con los que están luchando por volver a la sociedad. Compromiso que nos lleva a atender tanto el cuerpo como el espíritu”, porque “queremos ser una Iglesia comprometida con el hombre y mujer en su globalidad y en el tiempo que nos toca vivir”.