Carmen Guaita ha presentado su nuevo libro ‘Lo que mis alumnos me enseñaron. Reflexiones sobre la docencia’, de la editorial PPC, en el que recorre su trayectoria profesional como maestra. Entrevistada por Vida Nueva, la autora explica que el libro surge “por una necesidad de hacer balance de una vida profesional en la docencia muy larga, en la cual te das cuenta de que ser maestro no es haber estado tú en la vida de los alumnos, sino que los alumnos estuvieron en tu vida y eso es también lo que me impulsó a darle este título”.
El libro está compuesto por ensayos breves, ordenados en un guiño a la escuela por orden alfabético, y el contenido de éstos son los valores, aptitudes y reflexiones sobre la dignidad y transcendencia de la docencia. A lo largo de las páginas, en las que Guaita desgrana la memoria pedagógica y educativa de más de 40 años de docencia, hace un homenaje también a los maestros de los que fue alumna y “a las personas de las que yo sin ser alumna, he sido discípula. Porque la vida del hombre se establece sobre los encuentros que van forjando y la tarea de un docente es un gran encuentro, pero también es un gran aprendizaje”.
No es un libro de memorias
El profesor Mariano Martín Alcázar es el autor del prólogo, en cuyas líneas recuerda a una joven alumna “me ha emocionado mucho. No podía imaginarme que él la tuviera tan viva a aquella muchacha de la que fue profesor”, explica Carmen Guaita.
Su experiencia laboral en Extremadura, Canarias, Alcalá de Henares o Madrid capital, y la que desempeñó en el sindicato de profesores, Anpe se reflejan en las más de 200 páginas que tiene el libro. Pero, sobre todo, aparecen sus alumnos “he procurado que no todos los capítulos comenzaran con recuerdos directos de mis alumnos, soy consciente de que estos recuerdos los compartimos todos los profesores y no quería convertir el libro en un libro de memorias. Sin embargo hablo de los alumnos que me han marcado, cuento experiencias de clase en las que los profesores que lo han leído se han identificado”.
“Es un honor”
Para Carmen Guaita, “la docencia es, tal vez, la profesión más exigente del mundo, implica una manera de ser, de comportarse y de trabajar por los demás. Un profesor establece con cada uno de sus alumnos una relación muy prolongada en el tiempo, muy larga y muy intensa. La docencia es la profesión de la alegría, también del dolor y la profesión en la que estás obligado a ver la semilla poderosa que hay en el interior de cada persona”.
“Si tuviera que hacer un balance con pocas palabras diría ‘he enseñado a leer a centenares de personas’, creo que no puede caber un honor mayor para una profesión humana”, concluye la autora, que se encuentra inmersa en un nuevo proyecto, la escritura de su tercera novela.
Presentación
El libro fue presentado en la Asociación de la Prensa de Madrid, ante numeroso público y estuvo acompañada por Federico Mayor Zaragoza, presidente de la Fundación Cultura de Paz; Carmen Sanz Chacón, presidenta de la Fundación Mundo del Superdotado; Luis Fernando Vílchez, profesor emérito de la Facultad de Educación de la UCM; Juan Antonio Corbalán, médico y deportista; Naiara Larrea, estudiante de 2º de ESO, y Pedro Miguel García Fraile, director de PPC España.