Taiwán ha asegurado que su relación con el Vaticano es estable y que observará la relación entre la Santa Sede y China, tras la publicación del histórico acuerdo “provisional” por el nombramiento de obispos, según el cual el Papa readmitirá a la plena comunión eclesial a los obispos ordenados sin mandato pontificio.
Los nombramientos de obispos chinos, desde que el comunismo llegó al poder y se expulsó al nuncio apostólico, solo se permitían si pertenecían al culto católico de la Asociación Patriótica comunista china, rechazando la autoridad de la Santa Sede como gobierno de la Iglesia. Mientras que los obispos legítimos y fieles al Papa han sufrido persecuciones y muchos viven en la clandestinidad.
El Gobierno taiwanés se muestra preocupado porque este nuevo paso en las relaciones con China podría suponer el cambio del reconocimiento diplomático de la Santa Sede hacia Pekín. El Vaticano es el último aliado diplomático de Taiwán en Europa.
El presidente Emérito del Pontificio Consejo para los Textos Legislativos, cardenal Franceso Cocoopalmerio, inauguró el Simposio ‘Reformas Legislativas en la Iglesia realizadas por el papa Francisco’, en la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Salamanca.
Coccopalmerio ha destacado el mayor número de intervenciones legislativas respecto a la Curia Romana que “no solo sirve para unificar y dar mejor eficacia al trabajo, sino que la Curia no tiene su fin en sí misma, está al servicio del pontífice y de todo el pueblo de Dios”. Y se ha referido a la creación del Dicasterio para la Comunicación y al Dicasterio para Laicos, Familia y Vida como instrumentos para “buscan acercar el trabajo de la Curia a los desafíos de los tiempos actuales”.
En su ponencia inaugural, el cardenal habló de la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores, creada en 2014 por Francisco: “Es un signo de que el Papa se toma en serio la protección de los menores”. El proceso canónico para la declaración de nulidad matrimonial, Coccopalmerio dijo que el Papa “ha simplificado los procedimientos e introducido un proceso más breve en el que el obispo es juez de determinadas causas”.
La estadounidense diócesis de Arlington ha anunciado que está llevando a cabo una revisión de todos los archivos clericales y que publicará una lista de sacerdotes y diáconos que han sido acusados creíblemente de abusos sexuales a menores. El encargado de comunicación de la diócesis, Billy Atwell, declaró que “la publicación traerá a las víctimas curación y consuelo en el Señor e inspirará a aquellos que aún no se han presentado a contar su historia”.
En Arlington ya se han realizado dos revisiones previas, una en 2003 y otra en 2011 para asegurarse de que no se había pasado nada por alto y para verificar que todos los informes se habían hecho aplicando ley.
El obispo Michael Burbidge se ha reunido regularmente con supervivientes de abuso sexual y, a principios de septiembre, mantuvo un encuentro con los seminaristas de la diócesis para expresar su compromiso con su bienestar. Después envió una carta a los padres de los seminaristas en la que manifestaba su compromiso con la protección de sus hijos y su confianza personal en los seminarios a los que los enviaban.