Revitalizar la liturgia haciendo un uso más atractivo de la música, la catequesis y las homilías. Ese es el método que han encontrado hoy, 5 de octubre, los padres sinodales para que los jóvenes no se aburran durante la eucaristía, según informa Vatican News.
“La estética, la belleza tienen su papel hoy en día y no podemos no prestarles atención a la belleza de la liturgia o la música. Todo esto requiere discernimiento. La homilía es demasiado aburrida, habría que encontrar una forma de hacerla más atractiva”, ha señalado el arzobispo de Sidney, Anthony Colin Fisher, quien ha manifestado además que los jóvenes están cansados de esa rutina y ya no se le presta atención a las homilías.
Por otro lado, el prelado ha recordado, además, los casos de abusos sexuales en la Iglesia católica australiana, extendiendo sus reflexiones a lo que ha pasado en otros países también, como Estados Unidos, Irlanda o Canadá. “Deseo que los jóvenes nos oigan decir que lamentamos lo ocurrido y que tenemos vergüenza”, ha declarado. “La Iglesia debe ser el lugar más seguro del mundo para los jóvenes”, ha dicho.
Durante la jornada también se han tratado temas como las relaciones extramatrimoniales. El prefecto del Dicasterio de la Comunicación, Pablo Ruffini, ha apuntado que “requieren de escucha dentro de la Iglesia, la importancia de la familia, la atención a los migrantes de segunda generación y el acompañamiento a los jóvenes”.
Respecto al papel de la mujer en la Iglesia, Manuel Ochogavía, obispo de Colón-Kuna Yala –Panamá-, ha señalado que este Sínodo servirá para abrir camino, pero que no se puede esperar que todo cambie a partir de él. “Es una cuestión que no se puede eludir”, ha dicho, añadiendo que para tratarla tienen que generarse nuevos espacios de participación.