Con la finalidad de dialogar sobre la importancia del apoyo a la construcción de paz y sobre los nuevos retos relacionados con la migración venezolana, una delegación de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), encabezada por su presidente, Oscar Urbina Ortega, arzobispo de Villavicencio, y por Héctor Fabio Henao, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social, iniciaron una gira por Europa visitando Bélgica, Inglaterra y Francia, donde sostuvieron encuentros de alto nivel con miembros del Parlamento Europeo, con el Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido, la Asamblea Nacional de Francia, con delegaciones de la Iglesia y Cáritas, entre otros.
Esta gira de incidencia –como ha sido calificada– logró reunir a los representantes de la Iglesia colombiana con importantes figuras políticas como Nigel Baker, jefe de la sección para América Latina del Ministerio de Relaciones Exteriores de Inglaterra, Chris Modem, encargado de Asuntos para Colombia, junto con Barbara Davis y Ulrike Beck, de la Agencia Católica para el Desarrollo (CAFOD), según reseña la CEC en su portal.
Asimismo tuvieron un encuentro con obispos de la Conferencia Episcopal de Inglaterra, y en Bruselas fueron recibidos por la Comisión de los episcopados de la Comunidad Europea (COMECE), mientras que en Francia sostuvieron un encuentro con Georges Pontier, obispo de Marsella, abordando en estos encuentros la situación de la Iglesia en Colombia de cara a su compromiso con la evangelización y su dimensión social para la construcción de la paz y la reconciliación.
Apoyo al proceso de paz
“El propósito de nuestro viaje, es conocer más de cerca las diferentes organizaciones que han apoyado las iniciativas de paz y reconciliación en nuestro país”, dijo Urbina en declaraciones recogidas por la CEC, y añadió que “ahora se trata de prestar más atención a las iniciativas en el territorio, porque la paz debe implementarse en diversas situaciones”.
El presidente de la CEC también explicó, con relación a los acuerdos de paz en Colombia, que “es una etapa compleja, lleva tiempo, pero las experiencias de las diversas organizaciones internacionales y ONG, que tienen una gran experiencia, son importantes. Entonces, es fundamental, a nivel político, el apoyo al proceso de paz dado por la Unión Europea”.
Proyectos compartidos en favor de las víctimas
Por su parte Héctor Fabio Henao, quien es también presidente de la Comisión Nacional de Paz (CNP), ente adscrito a la Iglesia colombiana, resaltó la labor compartida con la Cáritas Noruega en el departamento amazónico del Caquetá, sureste del país, en la sustitución de cultivos de coca, donde se ha podido demostrar que “es posible el trabajo de reintegración económica”.
Además, el director de Cáritas Colombia destacó otro proyecto que se desarrolla con mujeres víctimas del conflicto en el departamento de Putumayo, al sur del país, con el apoyo de Cáritas alemana. “En general, varios proyectos favorecen a las comunidades que han sufrido el conflicto y, en particular, a las numerosas víctimas”, subrayó Henao.
Pese a algunas situaciones complejas, como el asesinato de líderes y la amenaza a los acuerdos de paz, los representantes de la delegación colombiana compartieron un mensaje de confianza y, por tanto, un tema infaltable en esta visita fue el acuerdo de paz con las FARC. Al respecto, Urbina señaló que “este es un proceso complejo y lo sabíamos”.
Pasos para la paz
Sin embargo, la máxima autoridad de la Iglesia colombiana también aseguró “se han dado muchos pasos” al punto que “las FARC han entregado sus armas y están reingresando a la sociedad. Se han convertido en un partido político y tienen sus parlamentarios”.
En referencia a las negociones con el grupo guerrillero ELN (Ejército de Liberación Nacional), en reiteradas ocasiones la Iglesia ha instado a las partes a dialogar: “Hemos tenido un papel importante como observadores durante el cese al fuego en los últimos meses, se han logrado varios objetivos y ahora se trata de volver a la mesa de diálogo,” acotó Urbina.
El asesinato y las amenazas contra los líderes sociales también estuvo en la agenda y a juicio del Héctor Fabio Henao “se sabía que hay muchos actores violentos en Colombia, que no era suficiente hacer la paz con las FARC. Uno podría imaginar que estos diversos actores tratarían de tomar el control de los territorios que las FARC dejaron libres”.
Proteger a los líderse sociales
El presidente de la CNP denunció que “los grupos armados a menudo están vinculados al tráfico de drogas y la minería ilegal” por lo cual es imperativo tomar medidas para proteger a los líderes sociales, destacando que “las cancillerías de Francia y Gran Bretaña están involucradas en esto con importantes proyectos”.
“Debemos ser optimistas porque se han hecho muchas cosas y en muchas partes de Colombia la vida ha cambiado. Y aún se puede hacer mucho si los países amigos y las iglesias europeas continúan apostando por la paz”, agregó.
Foto: CEC