La Arquidiócesis de México, sede de la Basílica de Guadalupe, manifestó este día su preocupación por la instalación irregular de puestos comerciales en las inmediaciones del santuario mariano, pues ponen en riesgo no sólo la movilidad de los millones de peregrinos y turistas que visitan a la Virgen Morena en estas fechas, sino también su seguridad.
Así lo dio a conocer la Iglesia capitalina a través de una nota difundida en el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México, en la que explica que si bien en los últimos años, el Gobierno de la Ciudad de México –particularmente la alcaldía Gustavo A. Madero– había venido trabajando a favor del mejoramiento del entorno de la Basílica de Guadalupe, la habilitación improvisada de puestos comerciales sobre el corredor Fray Juan de Zumárraga demerita estos esfuerzos.
El pasado 3 de octubre, el alcalde de Gustavo A. Madero, Francisco Chíguil, denunció que ex funcionarios de esa demarcación habían instalado locales frente a la Basílica de Guadalupe, “que se auto asignaron antes de terminar su gestión”. Esto ha provocado enfrentamientos infructuosos entre policías auxiliares y los supuestos propietarios de los casi cien locales instalados de forma repentina en un espacio público protegido contra este tipo de actividad.
Un esfuerzo venido abajo
La Arquidiócesis a cargo del cardenal Carlos Aguiar Retes recordó que hace años, con la construcción de inmuebles destinados a mercados, las autoridades del gobierno local lograron reubicar a los comerciantes que durante mucho tiempo obstaculizaron las vías de acceso en los alrededores del recinto, y se rehabilitó la calle Fray Juan de Zumárraga mediante un programa de mejoramiento del espacio público.
“Estas y otras acciones tuvieron como finalidad no sólo dignificar las inmediaciones de la Basílica, sino principalmente brindar seguridad y facilitar la movilidad de los 20 millones de peregrinos que cada año visitan a la Virgen de Guadalupe”, señala el texto.
Además, explica que como parte de estos esfuerzos, el 3 de diciembre del 2012, el Gobierno de la Ciudad de México publicó en la Gaceta Oficial un decreto mediante el cual se estableció la naturaleza y destino del espacio público que rodea el santuario. En su artículo tercero, el decreto señala: “No se otorgarán permisos para ejercer el comercio en las vías públicas que comprenden el polígono a que se refiere dicho decreto”.
Conflicto entre autoridades
No obstante, con la instalación de locales comerciales sobre el banquetón Fray Juan de Zumárraga –advierte–, resulta preocupante para las autoridades de la Basílica, sobre todo ante el inminente incremento de devotos y visitantes en general, cuya movilidad y seguridad se ven vulneradas con esta acción.
“Frente a la proximidad de las Fiestas Guadalupanas, y ante varios intentos fallidos por solucionar este conflicto -que aparentemente tiene que ver con una disputa entre la administración saliente y la entrante por la posesión de este espacio que rodea a la Basílica de Guadalupe– “es importante la adecuada intervención de las autoridades de la Ciudad de México para garantizar el cumplimiento de la naturaleza del mismo, así como cumplir con su responsabilidad de velar por la integridad de los guadalupanos y turistas que visitan el santuario no sólo con motivo de la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, sino a lo largo de todo el año”, concluye.
