Gloria Liliana Franco: “El legado profético de Romero nos impulsa a caminar en medio de los pobres, con ellos”

  • La presidenta de la CLAR y de la CRC destaca “la fuerza del testimonio de Romero” que confronta y anima a la vida consagrada en el seguimiento a Jesús
  • Religiosos y religiosas celebran una eucaristía de acción de gracias por la canonización del arzobispo de San Salvador que dio su vida por amor a los pobres

Gloria Liliana Franco: “El legado profético de Romero nos impulsa a caminar en medio de los

Este jueves 18 de octubre la Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos y Religiosas (CLAR) y la Conferencia de Religiosos de Colombia (CRC) celebran, en Bogotá, una eucaristía de acción de gracias por la canonización de monseñor Romero. La cita es en la Iglesia de Santa Teresita (Cra. 18A # 43A-59), animada por los carmelitas descalzos.

Un profeta y mártir cercano a la vida consagrada

“Es una gracia contar con un santo profeta y mártir, tan próximo, tan nuestro”, manifiesta la religiosa Gloria Liliana Franco Echeverri, presidenta de la CLAR, consultada por Vida Nueva, al señalar que la canonización del arzobispo salvadoreño “es una posibilidad de hacer memoria y ponernos de cara a la dimensión profética de la vida consagrada”.

En sus tres años de ministerio pastoral al servicio de la arquidiócesis de San Salvador (1977-1980), Romero contó con el apoyo de religiosos y religiosas de todo el continente y, particularmente, de su país, como los jesuitas de la UCA y las carmelitas misioneras de Santa Teresa, con quienes compartió fraternalmente, en comunidad, en el Hospital de la Divina Providencia –que hasta el día de hoy dirigen–, donde también se encuentra la capilla en la que fue asesinado el 24 de marzo de 1980.

Como en los tiempos de Romero, la Hna. Gloria Liliana, quien también es la presidenta de la CRC, reconoce que “en contextos como los nuestros, no hay tregua, tenemos que ser la voz de aquellos a los que silencia el sistema”. En este sentido, y de cara al compromiso que compete a la vida consagrada, considera que “la Iglesia ha validado que el trabajo por la justicia social entraña el camino de santidad, irrenunciable en este momento de la historia”.

Legado profético

San Romero de América sigue siendo un faro que alienta el caminar de la vida consagrada. “La fuerza del testimonio de Romero nos confronta y anima en el camino del seguimiento a Jesús”, comenta la presidenta de la CLAR.

Su huella profética continúa inspirando a quienes consagran su vida por la causa del Reino y hacen posible la ‘Iglesia en salida’. “El legado profético de Romero, nos impulsa a la conversión, a desinstalarlos en cotidiano, a abrir los ojos a la realidad y caminar en medio de los pobres, con ellos”, concluye la religiosa.

Noticias relacionadas
Compartir