28 minutos duró la audiencia privada que mantuvieron este lunes el papa Francisco y el presidente de Colombia, Iván Duque, en el Palacio Apostólico del Vaticano. Jorge Mario Bergoglio le dejó un significativo mensaje al presidente del país latinoamericano al final del encuentro cuando le regaló un medallón que representa un olivo cuyas ramas unen dos partes separadas y tiene el siguiente lema: ‘Busca lo que une y supera lo que divide’.
“Deseo que sus dos manos sean como estas dos ramas, que unan Colombia y solucionen esta veta que fueron los cincuenta años” de conflicto, le dijo el Pontífice a Duque, que llegó al poder el pasado agosto aupado por una posición muy crítica con el acuerdo de paz suscrito entre la antigua guerrilla de las FARC y el anterior presidente, Juan Manuel Santos.
Duque le dijo a Francisco que el regalo y su mensaje significaban mucho para él, asegurando que siempre trata de buscar para los colombianos “lo que nos une y no lo que nos divide”. El Papa le respondió, refiriéndose al medallón: “Por eso lo escogí”.
“Disfrutamos mucho de su visita”
En los instantes iniciales de la audiencia, el presidente le recordó al obispo de Roma su viaje a Colombia en septiembre de 2017. Comentó que todos los colombianos “disfrutamos mucho de su visita, de sus mensajes de unidad y de alegría para todo el país. Mi admiración y gratitud para usted”.
Después de entrevistarse con el Papa, Duque se reunió con el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, que estaba acompañado por monseñor Antoine Camilleri, subsecretario para las Relaciones con los Estados. La delegación colombiana estaba formada por 17 personas, entre ellos el ministro de Relaciones Exteriores, Carlos Holmes Trujillo, y el de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, además del embajador colombiano ante la Santa Sede, Julio Aníbal Riaño. También había una significativa presencia de la familia del presidente, que estuvo acompañado por su esposa, sus tres hijos, su hermano, su madre y su suegra.
En su comparecencia ante los medios tras las audiencias con el Papa y Parolin, Duque explicó que habló con Francisco de la situación de los emigrantes venezolanos acogidos por Colombia. “No hemos cerrado las fronteras a nuestros hermanos venezolanos, que huyen de la desolación causada por una dictadura”, dijo el presidente, aplaudiendo el apoyo de Bergoglio “para que sigamos haciendo una política fraterna de acogida” a los ciudadanos del país caribeño.
Condiciones para el diálogo con el ELN
También hablaron del acuerdo de paz con las FARC. El Pontífice respaldó la “reincorporación efectiva de personas que dejan la violencia y quieren formar parte de un proceso de reconciliación, búsqueda de la verdad, justicia, reparación y no repetición”. Con Parolin, Duque trató la negociación con el ELN y manifestó que el diálogo solo podrá avanzar si este grupo guerrillero entrega a las personas que mantiene secuestradas y pone fin “a cualquier actividad violenta y criminal”.
El Vaticano, por su parte, informó en un comunicado de que en las “cordiales” conversaciones se destacó la contribución de la Iglesia “en el proceso de paz y en favor de la reconciliación”. También desveló la nota que el Papa y Duque trataron “temas de interés común”, entre los que citó “la protección de la vida, la lucha contra la corrupción y el narcotráfico, la promoción de la legalidad y la salvaguardia del medio ambiente”.