La Iglesia chilena deberá pagar una millonaria indemnización a las víctimas del sacerdote pedófilo Fernando Karadima. Así lo ha dictaminado la justicia del país, que ha ordenado el pago de 575.000 euros. La Corte de Apelaciones de Santiago revocó un dictamen anterior y determinó fallar en favor de los demandantes, Juan Carlos Cruz, José Andrés Murillo y James Hamilton, como recoge BioBioChile.
Los denunciantes difundieron un comunicado donde compartieron su “alegría” por la decisión del tribunal. Según sus palabras, la decisión de la Corte demuestra que el Estado “se está poniendo al día para que, independiente del poder de una organización, todos deban responder por sus actos, especialmente si tienen a su cargo el cuidado de niños, adolescentes y personas vulnerables”.
Asimismo, añadieron: “Este fallo debiera marcar el fin de la impunidad en materia de abuso sexual clerical”. Aunque el tribunal chileno emitió el fallo, el texto no ha sido dado a conocer aún. Los obispos, por su parte, reaccionaron a la noticia con un breve comunicado en el que mantienen que analizarán el fallo “para resolver los pasos a seguir”.
117 parroquias al servicio de los migrantes
El obispo de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, ha habilitado las 117 parroquias de la diócesis para la atención de los miles de migrantes provenientes de Honduras, El Salvador y Guatemala. El prelado ha pedido a la sociedad mexicana que se comprometa, en la medida de lo posible, en ayudar a estas personas.
Armendáriz ha dicho que las parroquias darán atención simultánea hasta a 60 personas, y que en estas se les dará un trato digno, pues “las puertas de la Iglesia siempre están abiertas”. “Ahorita nos estamos preparando para que quienes lleguen hasta acá encuentren en las parroquias un espacio para descansar, un espacio para alimentarse, donde se les provea de agua y alguna otra necesidad”, dijo.
El prelado instó también a la sociedad a abrir los brazos para que “estas personas no pierdan la esperanza, pero sobre todo se sientan acogidos”, como recoge Eje Central.
Cáritas Burgos pide colaboración económica
Cáritas Burgos pide colaboración económica para “recuperar a las personas, acompañándolas en su día a día”. Los más de 200 trabajadores, voluntarios y participantes de Cáritas se dieron cita el fin de semana en el Seminario para celebrar su encuentro anual. Durante el mismo, la entidad reclamó la necesidad de mayores donativos para evitar que la sostenibilidad de sus programas “se debilite”.
“Nosotros no damos dinero y nos desentendemos del problema, nosotros queremos recuperar a las personas haciendo que sean ellos mismos protagonistas de su recuperación personal”, ha dicho Jorge Simón, director de la entidad. No obstante, hizo partícipes a todos de su principal preocupación: “La reducción de los recursos y nuestros programas deberán acompasarse en función de ellos y esto nos puede ocasionar algún pequeño desajuste que habrá que gestionar”. A pesar de ello, aseguró: “Somos Cáritas y nunca dejaremos de hacer lo que estamos haciendo; otra cosa es que podamos aplicar más o menos fuerza en función de los recursos que dispongamos”.
De ahí que Cáritas haga este año un especial llamamiento a la sociedad para seguir realizando sus proyectos. La percepción de la conclusión de la crisis y el revuelo político favorecen que los donativos disminuyan, “pues la gente está pendiente a otras cosas y olvidan las aportaciones periódicas que realizaban a Cáritas”, según informa la diócesis a través de un comunicado.