El PSOE propondrá reformar la Ley de Memoria Histórica para prohibir de forma expresa que los restos del dictador Francisco Franco descansen en lugares abiertos al público, como la cripta de La Almudena, donde su familia quiere enterrarlo una vez sea exhumado del Valle de los Caídos. Así lo han confirmado hoy, 6 de noviembre, a Europa Press fuentes del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados.
Los socialistas registrarán próximamente varias enmiendas a la reforma de la Ley de Memoria Histórica que se tramita en el Parlamento, cuyo desarrollo va a prolongarse tras la petición de PP y Ciudadanos de prorrogar el plazo de presentación de enmiendas. Del mismo modo, otra de las modificaciones a la ley que quieren introducir los socialistas incluye sanciones a aquellos espacios abiertos al público cuyos responsables no impidan episodios de enaltecimiento o exaltación del público.
Los castigos podrían llegar al cierre temporal o incluso definitivo de una iglesia o cementerio donde tengan lugar ensalzamientos de la dictadura, según el sentido de las enmiendas en las que trabajan.
El presidente del PP, Pablo Casado, advirtió de los nacionalismos y populismos que se “disfrazan” de “ideología de salvación” y vienen a ser la “sacralización de la política”. Casado participó en la tarde de ayer, 5 de noviembre, de la III Conferencia Internacional sobre Religiones y su Contribución a la Paz y la Concordia impulsada por la Fundación Evsen y dedicada en esta ocasión a las minorías religiosas, como informa Europa Press.
Casado destacó que este tipo de foros que ponen en diálogo a líderes de diferentes religiones ejercen una “poderosa influencia” y establecen “puentes de diálogo para mitigar los conflictos de este tiempo, que siguen siendo muchos por desgracia”. “Contar con representantes de las grandes religiones en diálogo abierto contribuye a derribar barreras que los prejuicios han levantado a lo largo de siglos”, subrayó.
Sobre las minorías, a las que estaba dedicado este foro, Casado apuntó que “la democracia no se basa en una suerte de tiranía de la mayoría sino que la característica esencial que tiene es la libertad y el respeto a las minorías”. “Esta protección a los más débiles incumbe a todos, no podemos mirar a otro lado con indiferencia cuando vemos víctimas de la violencia intransigente de quienes tratan de imponer una única fe o moral”, concluyó.
Migrantes con Derechos pidió ayer, 5 de noviembre, en el Congreso de los Diputados que se derogue la regulación de las devoluciones en caliente de la ley de seguridad ciudadana, por considerar que da cobertura legal a una práctica ilegal. En su comparecencia ante la Comisión de Interior de la Cámara Baja, el jesuita Josep Buades y María Segurado han rechazado las “devoluciones sumarias” de inmigrantes y exigieron que se derogue la disposición que establece un régimen especial de rechazo en la frontera de Ceuta y Melilla.
Tras hacer hincapié en que el Estado es competente para controlar y vigilar sus fronteras, y valorar el trabajo de las fuerzas de seguridad, Segurado mantuvo que “la realidad habla” de que los rechazos en frontera ponen en riesgo la protección de la dignidad de los seres humanos. “No estamos diciendo que no haya que hacer un proceso de devolución, estamos diciendo que hay que hacer una identificación, un procedimiento de devolución cuando esto sea lo que la ley establece, pero con garantías”, añadió.
“Detrás de nuestras palabras hay vidas, hay vidas que merecen una consideración y hay una labor legislativa importantísima y está en su mano el protegernos mejor”, concluyó Buades, como recoge EFE.