Pulsar la opinión de los jóvenes para ofrecérsela a la Iglesia y a la propia sociedad, porque “los católicos no somos irrelevantes, todavía tenemos mucho que decir”. Este es el objetivo que está detrás del XX Congreso Católicos y Vida Pública que, del 16 al 18 de noviembre, y bajo el lema ‘Fe en los jóvenes’, organizan en Madrid la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) y el CEU, según ha señalado en un encuentro con periodistas su presidente, Alfonso Bullón de Mendoza (en la foto, a la izquierda, junto a Rafael Ortega).
“Queremos tener la ocasión de escuchar a los jóvenes, de saber cómo ven el mundo y cómo viven la fe, de saber cómo interiorizan el mensaje de Jesús, de saber cuáles son sus inquietudes, porque ya en sus orígenes, la ACdP la constituían hombres y mujeres que se movían en medio del mundo”, señaló el presidente de esta señera institución eclesial.
No es casual que este Congreso quiera dar voz a los jóvenes justo después del Sínodo de los Obispos que Francisco clausuró el 28 de octubre en Roma: “Nosotros tenemos fe en los jóvenes, pero los jóvenes también tienen fe y, tras esta asamblea sinodal, hemos querido darles la voz a ellos, que han vivido un sínodo que ha sido muy importante, a pesar de que había muchos vaticanistas que esperaban que fuese un fracaso, pero ha sido todo un éxito, con un Papa que no da puntada sin hilo”, señaló por su parte Rafael Ortega, el director del Congreso.
Un Congreso para no encerrarse
Como aspectos más destacados del evento, Ortega se refirió al debate universitario entre representantes de doce de las universidades más importantes de España; el hecho de que en las mesas redondas no solo haya jóvenes, sino también personas mayores para que puedan debatir entre generaciones; así como los retos que suponen las redes sociales y cómo están incidiendo en la juventud. Además, por primera vez se realizarán un macroconcierto.
“Queremos que la sociedad sepa lo que hacemos, que conozca lo que pensamos, por eso hacemos estos congresos ad extra, hacia afuera, porque no queremos estar encerrados, sino que queremos hablar y discutir. De ahí que, tal vez, estos congresos, que son una obra muy importante para la ACdP, tienen que ir más afuera, llegar a más gente, incluso salir a otro país”, apuntó el director.
Entre otros temas, el Congreso -que en sus dos décadas de singladura acumulas unas 30.000 páginas en actas– abordará las conclusiones del Sínodo sobre los Jóvenes, el buen o mal uso de las redes sociales, las relaciones nietos-abuelos, la influencia de los medios audiovisuales y las series de ficción en los jóvenes o la cuestión vocacional en la Iglesia.