Durante la homilía de la misa en Santa Marta celebrada hoy, 10 de diciembre, el papa Francisco ha invitado a los presentes a “celebrar la Navidad con verdadera fe”. Comentando el episodio del Evangelio de Lucas en el que se narra la curación de un paralítico, Francisco ha subrayado que “la fe infunde valor y es la manera de tocar el corazón de Jesús”.
“Jesús admira la fe en las personas”, ha recordado Bergoglio, como es el caso del centurión que pide la curación de su siervo o el de la mujer que intercede por su hija poseída por un demonio. De la misma manera, “Jesús reprocha a las personas de poca fe, como es el caso de Pedro ante sus dudas”. Y es que “con fe”, ha añadido el Papa, “todo es posible”.
“Hoy hemos pedido esta gracia: que en esta segunda semana de Adviento nos preparemos a celebrar la Navidad con auténtica fe”, ha dicho. Unas fechas que se pueden festejar “de manera mundana”, pero que “el Señor nos pide que lo hagamos con fe”. Sin embargo, reconoce que “defender la fe” no es sencillo, por lo que “debemos pedirle al Señor esta gracia”.
De la misma manera que el ciego del capítulo 9 de Juan, que reconoce al Mesías en Jesús, Francisco ha animado a “confiar nuestra fe a Dios, defendiéndola de las tentaciones del mundo”.
Por este motivo, ha invitado a los presentes a profundizar en el capítulo de Juan para “propiciar en nuestro corazón un acto de fe” que ayude a decir “creo, Señor”. “Ayuda a mi pequeña fe, defiéndela de la mundanalidad, la superstición, las cosas que no son de fe”, a lo que ha añadido la importancia de evitar reducir la fe a “teorías, ya sea teologizando o moralizando”.