El Obispado de Girona ha informado hoy, 28 de enero, por medio de un comunicado, que creará una comisión para investigar los abusos y presentar informes de los resultados ante la Santa Sede. La decisión ha sido tomada a partir del caso hecho público por el diario Ara, que señala a un monje de Vilobí d’Onyar de abusar presuntamente de varios menores durante tres décadas.
La nueva comisión se creará de acuerdo a la normativa canónica y a los protocolos vigentes, comportando incluso “medidas cautelares”, respetando siempre la presunción de inocencia.
Por otro lado, la diócesis asegura que no tenía “constancia de ninguna queja” sobre los casos de Vilobí d’Onyar, y que las personas a las que alude el diario ya han fallecido, “sin que haya ningún documento en los archivos diocesanos con las visitas que se exponen”.
Sin embargo, “El Obsipado de Girona pide perdón a las presuntas víctimas y a sus familias por el sufrimiento y les ofrece su plegaria y comprensión”, al igual que su “total disposición a colaborar en todo lo que sea necesario para esclarecer los hechos”, siempre con “la voluntad de la mayor transparencia”.
El comunicado alude a que esta medida se toma “en la línea del Papa Francisco”, condenando “rotundamente cualquier tipo de abusos sexuales realizados a menores” y se solidariza “con todas las víctimas y familiares, y con el dolor que sufren”.