La de Ouagadoudou era, al menos hasta el viernes pasado, una pequeña comunidad salesiana de cuatro hermanos. Una de las dos presencias que la congregación tiene en Burkina Faso. Los salesianos atienden un centro socioeducativo y un oratorio de actividades juveniles. El director era el cordobés Antonio César Fernández, asesinado al poco de cruzar la frontera procedente de Togo tras recibir tres disparos por presuntos terroristas yihadistas.
El salesiano llegó a África en 1982 y se movió por distintos países francófonos del entorno de Burkina Faso. Su aventura misionera comenzó con la apuesta de la congregación Salesiana para revitalizar las presencia misioneras en el continente negro, dentro del llamado Proyecto África en el que se implicaron de manera muy intensa las provincias religiosas españolas. Por ello, Antonio César Fernández fue los fundadores de la obra salesiana en Togo.
Preparando los funerales y la repatriación
En este mismo país espera a que puedan trasladarse sus restos mortales a Burkina Faso para que se celebren los funerales en las casas de las que ha formado parte, antes de ser repatriado a España a petición de la familia a las autoridades diplomáticas. Aunque el misionero siempre deseó ser sepultado en tierra africana, la trágica situación en que se ha visto envuelta la muerte ha incrementado el “profundo dolor” que siente la familia y que los salesianos de la provincia salesiana de África francófona occidental hayan desistido del proyecto inicial de que sus restos descansarán en la casa del noviciado. “No hemos querido seguir peleando nos el cuerpo de un mártir”, afirman a Vida Nueva.
Fernández es para los salesianos nativos uno de los “constructores de la inspectoría” y por ello antes de que sea repatriado han organizado vigilias de oración y misas en diferentes comunidades para el miércoles, jueves y viernes. El sábado está previsto el funeral una vez que el cuerpo llegue desde Togo, donde fue trasladado por cercanía tras el atentado, según ha informado a este medio el salesiano Didier Meba, que ha tenido que hacerse cargo de la comunidad de Ouagadoudou. Fuentes diplomáticas piensan que el traslado a España se realice, posiblemente, el próximo domingo.
Junto con la documentación del traslado sigue abierta la investigación prometida desde Exteriores con las condolencias del presidente Pedro Sánchez. En España el proceso es dirigido desde la Audiencia Nacional. Hasta ahora no se ha comunicado nada al respecto a las comunidades locales. Ayer en Córdoba, el rey Felipe VI transmitió sus condolencias al obispo Demetrio Fernández, diócesis de origen del misionero salesiano.