Tres consejos. “Estén cercanos a Dios, al pueblo y… al obispo”. Este ha sido el mensaje que el papa Francisco les ha dirigido hoy, 20 de febrero, a los seminaristas de la diócesis de Getafe, que han asistido a la audiencia general celebrada en el aula Pablo VI para conmemorar los 25 años de la creación del seminario diocesano.
En los saludos a los peregrinos en las distintas lenguas al final de la audiencia, Jorge Mario Bergoglio ha mencionado al grupo de seminaristas que se encontraban acompañados por su obispo, Ginés García Beltrán. “Bienvenidos. Que el Señor nos conceda la gracia de no tener miedo y de saber que no estamos solos, porque no hay nada en esta vida que pueda apartarnos de su amor de Padre. Que Dios los bendiga a todos”.
Sin embargo, el mensaje no se quedó ahí, ya que, al término de la audiencia, se ha acercado hasta el grupo y les ha dirigido, de nuevo, unas palabras. “Son 30 seminaristas y el resto sacerdotes… y cinco diáconos”, le ha dicho García Beltrán. “Pues sigan adelante”, ha espetado.
A renglón seguido, se ha explayado con tres consejos para que se lleven en la mochila de vuelta a casa. “No dejen la oración, y en la oración, la virgen. Otra cosa, estén cercanos al pueblo de Dios, siempre con el pueblo, porque si un cura se aleja del pueblo, se clericaliza en el peor sentido de la palabra. Y el clericalismo es una perversión. El verdadero sacerdote está con el pueblo y luego va a rezar. Es decir, es cercano a Dios y al pueblo. Y una cosa más: cercano al obispo, ya que sin el obispo no se funciona. ¿Está claro? No se olviden”, ha concluido, no sin antes pedirles que recen por él.