“Romper paradigmas para una educación más acorde con los signos de los tiempos”, es de este modo como SM Colombia a través del taller ‘Innovaciones pedagógicas en el aula’, en el marco de Expocatólica 2019, ofreció a estudiantes y profesores herramientas novedosas para que el aula de clases se convierta en una verdadera fiesta de saberes a tono con las realidades actuales.
Vida Nueva conversó con Camilo Andrés Fajardo, coordinador de formación de educación religiosa de SM Colombia y organizador del taller, para ahondar en esta actividad que reunió a más de 50 participantes la mañana del viernes 8 en el Ágora de Bogotá, en un segundo día intenso de jornada.
Pedagogías disruptivas
Este taller desarrollado por el equipo de SM Colombia presentó las claves para cambiar los paradigmas en el aula: “en resumidas cuentas cómo romper las pedagogías tradicionales para empezar a trabajar sobre ciertos motivadores que posibilitan el desarrollo de habilidades en los estudiantes”, ha dicho Fajardo.
“Si se tiene la motivación en el alumno, que es lo más importante, el docente podrá jugar con ciertas pedagogías disruptivas y cuando digo disruptivas me refiero a romper con la pedagogía tradicional, entonces el primer momento de este taller consistió en explicar esto”, ha dicho.
Innovar en el aula
El taller constó de muchas dinámicas y posibilidades para presentar esta nueva pedagogía. Una de ella apeló a la lúdica. Para ello jugaron con cartas o naipes para aprender matemáticas, que a juicio del especialista de SM “lo usamos habitualmente para compartir con amigos, pero no de manera consciente para aprender”.
Otro ejemplo de este taller consistió en armar un robot con un set de palillos y cinta de materiales formativos que tiene SM. “Todo esto lo podemos encontrar en los programas que presenta SM en sus textos escolares, plataformas virtuales”, ha informado Fajardo, quien también considera que “cuando mejoramos el ambiente de aula, por ende mejoramos el aprendizaje”.
Clases en otra perspectiva
A juicio del coordinador del taller “hubo una gran acogida por parte de los participantes, pues se logró la interacción de profesores y estudiantes, que más de las veces no suele pasar, porque el profesor dirige la clase, mientras que el estudiante la recibe”.
Asimismo con esta dinámica de integración profesores y estudiantes aprenden y enseñan mutuamente, lo que “posibilita justamente que cambie la perspectiva de una clase” motivando en los docentes a mejorar sus prácticas ante las exigencias de un mundo dinámico.
Al final del taller, los grupos de trabajo integraron sus aportes y conclusiones en una especie de ‘collage’ en las paredes del auditorio para que cada uno dejara un mensaje con la intención de ver las reflexiones a las que llegaron.
De los nuevos lenguajes
“El hecho que un docente esté anclado a una vieja forma de enseñanza no significa que esté errado”, ha comentado el facilitador de SM, al tiempo que invita a sus colegas a buscar una nueva forma de impartir sus clases: “eso es lo que queremos mostrar a través de estas experiencias disruptivas”.
Finalmente, afirmo que requerimos innovar porque “a nuestros estudiantes todo le habla, en la actualidad han surgido un gran número de lenguajes que los atrapan, y pensar que vamos a formar de la misma manera como nos formaron a nosotros, estaríamos en una dirección contraria que no permite reingeniarnos y adaptarnos a los actuales tiempos”.
