Entrevistas

La UCV busca responder a la emergencia educativa con el II Congreso Internacional de la Cátedra Scholas Ocurrentes

  • El ateneo valenciano acogerá del 10 y 12 de abril este foro dedicado al ‘Pacto educativo y la ciudadanía global: bases antropológicas del bien común’
  • Para la directora de la cátedra Scholas Ocurrentes, Yolanda Ruiz, la educación “debe tener en cuenta el componente relacional y estar al servicio de la persona





La ‘Cátedra abierta Scholas Ocurrentes’ de la Universidad Católica de Valencia celebra entre el 10 y 12 de abril el II Congreso Internacional dedicado al Pacto educativo y la ciudadanía global:bases antropológicas del bien común”. Una cita en la que colabora la Fundación SM y la editorial PPC y que reunirá en la Sede de Santa Úrsula del ateneo valenciano experiencias y expertos de todo el mundo.

La profesora de psicología Yolanda Ruiz, directora de la cátedra abierta Scholas Ocurrentes de la Universidad católica de Valencia y una de las impulsoras de este encuentro, presenta a Vida Nueva algunas de las propuestas de este 2º congreso.

PREGUNTA.- ¿Por qué este II Congreso de la cátedra Scholas Occurrentes?

RESPUESTA.-Es una Cátedra de la Universidad Católica de Valencia que nace en 2016 fruto del convenio realizado con la Fundación Pontificia. Desde el día de la firma, comenzamos a trabajar en la universidad y a perfilar las acciones fundamentales de sensibilización, formación, investigación y acción, siempre con el apoyo de la Fundación Pontificia. Quiero destacar que somos la única Cátedra del mundoque ha realizado un Congreso de estas características. En 2017 ya llevamos a cabo el primero. Y del 10 al 12 de abril tendremos el segundo.

Cambio de época

P.- El tema elegido es el pacto educativo y la ciudadanía global, bases antropológicas del bien común. ¿Por qué es necesaria esta reivindicación?

R.-Actualmente sabemos que estamos ante una situación clara de emergencia educativa. En España además carecemos de pacto educativo, pues parece que desde el ámbito político no hay acuerdo. Todo esto junto al cambio de época que vivimos, hace urgente que todos los actores educativos estén alineados en la misma direccióny trabajen conjuntamente hacia el mismo horizonte: generar estilos de vida en nuestros alumnos que les permitan actuar desde la realidad transformándola en pro del bien común.

La Cátedra pues pretende crear un espacio que profundice no sólo en cuestiones de carácter didáctico o en la mera praxis educativa, sino en el sentido que debe tener ésta. Queremos que nuestros jóvenes de hoy, sean adultos maduros y responsables el día de mañana, y que su incidencia pública, independientemente de la esfera en la que se desarrollen profesionalmente, tenga el bien social y moral como horizonte de sus acciones.

De ahí la relevancia de ahondar en la educación considerando disciplinas como la antropología y la ética, pues como dice la Doctrina Social de la Iglesia, el principio del bien común procede de la dignidad, unidad e igualdad de todas las personas. Toda vida social debe estar impregnada del bien común para encontrar plenitud de sentido. También, el Papa Francisco en la encíclica ‘Laudato si’, pone en valor la importancia de los vínculos y de la interconexión de todo con todo. Si la educación es un bien social indudablemente debe tener en cuenta el componente relacional y estar al servicio de la persona. Y para ello es necesario que todos rememos en la misma dirección, sin desviarnos hacia ideas individualistas, relativas o intereses particulares.

Oportunidad de crecimiento

P.- ¿Por qué las escuelas tienen que potenciar al máximo la ‘cultura del encuentro’?

R.- Vivimos en un mundo plural, también en la educación. En todos los centros educativos públicos, sean de iniciativa estatal o privada, predomina la diversidad a nivel económico, cultural, social o incluso de creencias religiosas. Pero ésta no debe percibirse como amenaza, sino como oportunidad para crecer y para ensanchar nuestro horizonte de conocimientos y experiencias. La cultura del encuentro de la que nos habla el papa Francisco pretende impulsar esa apertura hacia lo diferente, lo que no conocemos, lo que no controlamos. Y es en ese encuentro donde el aprendizaje es especialmente significativo y potente.

P.- El programa es intenso, con ponentes tanto locales como internacionales y unas cuantas experiencias. ¿Qué destacarías?

R.- Creo que el programa del Congreso está muy acorde con el proyecto pedagógico de Francisco y con su inquietud de integrar armónicamente los tres lenguajes: cabeza, corazón y manos. Desde esta perspectiva, hemos articulado este programa, intercalando ponencias que nos ayuden a situar los puntos claves a nivel antropológico y educativo, con experiencias que ofrezcan pistas didácticas que desciendan a lo concreto y se puedan aplicar en la práctica.

Todos los ponentes son de una calidad extraordinaria, pero quisiera destacar la ponencia inaugural del cardenal Ravasi y la del Presidente Mundial de Scholas, José María del Corral. Además, contaremos con el Presidente de la Comisión científica del programa Cátedras Scholas, el profesor Italo Fiorin. Disciplinas como la filosofía, la pedagogía, la religión y la economía estarán presentes en este Congreso. Creo que es una cita ineludible para todo educador o persona interesada por la educación.

Arte, deporte o prevención del bullying

P.- Además, de forma permanente, la UCV ha promocionado una cátedra con el nombre de Scholas Occurrentes. ¿Qué proyectos se impulsan desde esta cátedra?

R.- Desde la Cátedra Abierta Scholas Occurrentes se pretende generar un espacio de reflexión y de acción en el que todos los agentes educativostengan repercusión sobre la realidad, humanizando la educación, acompañando procesos que ayuden a despertar las conciencias de los agentes educativos en pro del bien común.

Se llevan a cabo diversos proyectos que promueven la cultura del encuentro. Quisiera destacar los relacionados con el arte(‘Scholas Arts’), utilizando la fotografía como lugar de encuentro intergeneracional y el teatro para acercar a los alumnos a la belleza, a la armonía y a valores como el respeto, el diálogo, la solidaridad, el compromiso, la responsabilidad… Tambiénproyectos vinculados al deporte(‘Scholas Deporte’) para trabajar la inclusión, la motivación y el trabajo en equipo. Paralelamente desarrollamos acciones formativas, concretamente este año se ha ofrecido el curso “Aprendizaje-Servicio (ApS) en tiempos de la ‘Laudato si’: fidelidad, ciudadanía activa y justicia social”, impartido a los 300 profesores de religión de la escuela pública y a los 67 colegios diocesanos de Valencia.

Y por último, en el ámbito de investigacióndestacaría líneas de trabajo relativas a temáticas como ciberbullying, la adicción a la pornografía y la trata de personas, así como diversas publicaciones. La última tituladaRetos educativos de una ciudadanía global: periferia, encuentro y solidaridad’ esperamos tenerla disponible en el Congreso.

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