El cardenal Carlos Amigo ya tiene su calle en Sevilla. O Sevilla ya tiene una calle para el cardenal Amigo. El arzobispo emérito de la diócesis hispalense fue homenajeado hoy en la tierra que pastoreó durante 27 años. En el acto, participaron entre otros, el alcalde sevillano Juan Vallejo y el actual prelado de la ciudad, Juna José Asenjo.
En torno a la una de la tarde, Amigo Vallejo retiraba la cortina que cubría los azulejos con su nombre en una travesía situada a los pies de la Giralda, tal y como aprobó el Pleno del Consistorio. “Se trata de una esquinita única. Un rincón patrimonial principal. Sus muchos años al servicio de la Iglesia de Sevilla le hacen acreedor de este reconocimiento. Gracias por tanto bien que hemos recibido de usted”, expresó el alcalde de la ciudad al cardenal.
El arzobispo Juan José Asenjo también elogió la “sencilla cercanía” de su predecesor: “Son dones cuantiosísimos que Dios ha concedido a Sevilla a través suya. Gracias al alcalde y la corporación municipal. Esta calle es signo del aprecio que les merece don Carlos y también la Iglesia”.
Por su parte, el cardenal Amigo respondió a ambas intervenciones desde su “profunda y sincera gratitud”. “Sevilla no es sólo la ciudad en la que he servido, es buena parte de la vida que vive en mí”, destacó el purpurado, que correspondió al gesto de la calle con un elogio al pueblo sevillano: “Yo les tenía una plaza muy grande en mi corazón”.