En una entrevista concedida a La Croix, el cardenal arzobispo de Muchich Reinhard Marx ha disertado acerca de la crisis por la que está atravesando la Iglesia en este momento. Unos problemas con los que el cardenal se ha mostrado muy crítico, señalando que “no solo se trata de haber destapado los casos de abusos sexuales, sino también a la falta de transparencia financiera y a una cultura del secreto”. Y es que “no tenemos una respuesta certera a esta crisis, pero lo que está claro es que la solución está en la Iglesia universal, no solo en Roma”.
“Debemos convencer de nuevo de que la Iglesia es una fuerza para el progreso, una respuesta para hoy y para mañana, y para eso hace falta una vuelta al evangelio y a los pobres”, ha aseverado Marx, subrayando además que “para nosotros, los cristianos, cada hombre y cada mujer, más allá de su color, religión u orientación sexual, es a imagen de Dios” su color, religión u orientación sexual es a imagen de Dios”. Este mensaje, “tan necesario hoy” es, precisamente, la muestra de que “la fe no es una carga sino un camino”.
“Todos los días pido perdón por mis faltas, pude haber cometido errores y pido perdón”, ha dicho el cardenal Ricardo Ezzati en una entrevista a Radio Cooperativa, aclarando que “si ha si ha habido errores no han sido de encubrimiento ni errores concientes, son parte del aprendizaje propio, si tuviera que comenzar de nuevo, haría algunas cosas diferente”.
“En el gobierno que yo ejercí jamás he encubierto nada, todas las denuncias fueron investigadas oportunamente”, asegura, si bien reconoce que “hay investigaciones más complicadas que otras, pero es un trabajo que el obispo no hace en primera persona”.
Así pues, Ezzati ha explicado que “las funciones están distribuidas dentro de las diócesis y hay un vicario judicial, la denuncia no le corresponde hacerla al obispo, tiene que ser un jurista y una vez terminada la investigación previa, tiene que tener el aporte de otros dos juristas que revisan su trabajo y ese se le presenta al obispo y en el caso que corresponda ver si corresponde hacer una investigación penal”.
El Arzobispado de Pamplona y Tudela ha señalado que la Iglesia diocesana “mantiene el compromiso con la tolerancia cero para cualquier caso de abusos en la Iglesia”, así como con el “impulso decidido del Papa Francisco para la erradicación de esta lacra de la sociedad”.
En cuanto a la denuncia presentada por un vecino de Estella contra un sacerdote por un presunto delito de abusos cometido en los años 60 en el colegio del Puy de Estella, el Arzobispado ha declarado que la diócesis “no ha recibido ninguna notificación relativa a los hechos denunciados”. Además, ha indicado que el sacerdote objeto de la denuncia falleció hace 25 años, motivo por el cual “ha resultado imposible conocer el contexto ni el alcance de los hechos denunciados, ni comprobar su veracidad”.
Desde el Arzobispado de Pamplona y Tudela han destacado que la Iglesia “tiene abierto un cauce permanente para la presentación de las denuncias en el ámbito canónico, a través de la Vicaría judicial, en conformidad con los protocolos vigentes en la Iglesia española”.