La senadora por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Laura María de Jesús Rodríguez Ramírez –mejor conocida como “Jesusa” Rodríguez– recibió un apercibimiento por parte del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) debido a sus declaraciones en contra de la comunidad católica.
El pasado 7 de marzo, en el salón de sesiones del Senado de la República, Jesusa Rodríguez utilizó los micrófonos para halagar a la presidenta de la organización “Católicas por el derecho a decidir”, con las siguientes palabras: “Celebro que una mujer, María Consuelo Mejía, quien, además de ser católica es inteligente, cosa que no es muy común…”.
De acuerdo con el oficio ORIENTA-272-19, firmado por el director General Adjunto de Quejas del Conapred, Paolo César Flores Mancilla, tras los dichos de la funcionaria pública, 16 personas se inconformaron ante este organismo, que depende de la Secretaría de Gobernación.
Como dependencia encargada de garantizar el derecho a la igualdad y no discriminación en el país, el Conapred señaló: “con fundamento en los artículos 17, fracción II; 20, fracción XXIX de la Ley, atentamente se le previene para evitar este tipo de expresiones que pudieran considerarse excluyentes o discriminatorias en contra de otras personas motivadas por su religión”.
El apercibimiento, que fue entregado en el Senado de la República el pasado 22 de marzo, recuerda a la senadora el derecho a la igualdad y no discriminación que se encuentra reconocido en el artículo 1º de la Constitución Política de México: “Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones…”.
Personas que no entienden su papel
Si bien algunos políticos manifestaron inmediatamente su molestia ante las declaraciones de la senadora por Morena, la Iglesia en el país también reviró a la legisladora, a la que dijo: “no ha acabado de entender su propia misión”.
A través de un editorial publicado por la Arquidiócesis de México, del cardenal Carlos Aguiar Retes, señaló: “Al querer igualar la confesión de una fe con la ineptitud o la falta de inteligencia, sencillamente esta servidora pública mostró que no ha acabado de entender su propia misión”.
La Iglesia capitalina consideró que es muy contrastante que un hombre o una mujer, sobre todo si tiene un cargo público, “tenga como consigna denostar o cancelar la buena acción, la inteligencia, la libertad de quien no piensa de manera igual a la suya”.
Y agregó: “En el Congreso de la Unión, y en muchos otros ambientes, lamentablemente se ha hecho más común que a base de gritos o protestas, que a base de calumnias o fáciles desacreditaciones, se pretenda tener la razón. Cancelar al otro porque no piensa como yo, simplemente es una necedad, tal parece que esa es la competencia que desarrollan cuantos ya están acostumbrados a la protesta, que están en contra de todo. Parecería que llegan a las instituciones públicas, sencillamente para seguir destruyendo, para seguir ejercitándose en una protesta de oficio”.
