Un hombre anticipa con ilusión el momento de reunirse con su esposa mientras ultima los preparativos de su nuevo hogar en Lisboa. Atrás queda su etapa neoyorkina marcada por el recuerdo de los atentados del 11-S. Él está en un recién estrenado paro laboral, ella organiza el traslado de su proyecto científico sobre los mecanismos neuronales que rigen la memoria y el miedo. Sobre estos mimbres, Antonio Muñoz Molina regresa a la ficción, con tintes góticos. Nada es lo que parece. ‘Tus pasos en la escalera’ (Seix Barral) nos habla de esperas y miedos, algo que nadie como el Premio Princesa de Asturias de las Letras y Nacional de Literatura podría abordar mejor.
PREGUNTA.- Su personaje es un hombre solitario que se aferra a la rutina, a lo doméstico, para mantener su equilibrio…
RESPUESTA.- Es algo que uno va descubriendo con el tiempo: la belleza de lo cotidiano. Ese carácter sacramental del desayuno, el ritual, las flores, creo que es muy importante y que obviamente lo aprendí de mujeres.
P.- A usted la cotidianidad siempre le ha dado mucho alimento para sus libros…
R.- Sí. Cada vez soy más partidario de meter cosas de mi vida, de lo que veo, leo o me rodea. Me gusta ir construyendo la ficción a partir de materiales de mi cotidianidad y de mis propios recuerdos… igual que los aviones me llevaron al 11-S y mis recuerdos de haber estado allí. Sabía que algún día mi experiencia sería parte de una novela. Así, me fui dejando llevar…
P.- ¿Qué es el silencio?
R.- Hay un silencio necesario y maravilloso, el de dos personas que se entienden sin decir nada. Y luego el silencio canceroso, el del libro, en que las personas se van recluyendo.
P.- Dice su personaje “me siento en el escritorio y… no hago nada”. ¿Contemplación?
R.- Hay un prestigio de la acción y la inmediatez que me parece exagerado. En el taoísmo hay un concepto muy interesante que es el no hacer, ¡porque el no hacer es una cosa activa! La no violencia es activa. ¿Para qué corremos tanto? Pascal dice “todas las desgracias le vienen al hombre de no saber quedarse solo en una habitación”.
P.- Y también no esperar nada…
R.- Meditar consiste en estar sentado y ver pasar las cosas. Y eso es fundamental para el disfrute de las artes.