Hace pocos días los marianistas de Argentina despidieron a los miembros de su Administración General, quienes visitaron el país en el marco de un recorrido que hicieron por el Cono Sur. El superior general, André Fétis, y sus tres consejeros, Pablo Rambaud, Michael Mc Award y Maximin Magnan, llegaron a Buenos Aires luego de la Pascua.
En Argentina, como luego lo hicieron en Chile, visitaron todas sus obras y a todos sus hermanos, tanto a los religiosos como a los laicos. En el campo de deportes que estos religiosos tienen en el barrio de Villa Soldati (Buenos Aires) compartieron un almuerzo con una parte de la familia marianista en argentina. Como anfitrión, el regional de Argentina, Xavier de Aguirre, dio la bienvenida a la mesa a religiosos, diáconos, laicos, educadores, y a quienes forman parte del grupo editorial SM en Argentina, representados por su directora general Marita Mesutti; Octavio Figueredo, director de PPC Argentina y Jorge Oesterheld, director de la edición para el Cono Sur de Vida Nueva. Luego, en una producción compartida con Canal Orbe 21 y Vida Nueva, Fetis conversó sobre su recorrido por el Cono Sur, sobre la vida religiosa hoy y sobre su vocación educadora.
Con una pasión sin igual por los jóvenes, el superior general expresó que, si bien los marianistas son religiosos, “en Argentina tenemos cuatro colegios y dos parroquias”. Pero más allá de la actividad propia de estas obras, “tenemos muchas otras actividades alrededor de nuestras cosas. Como movimiento de fe y actividades sociales y solidarias”.
“Nuestra congregación está muy involucrada con la educación de los jóvenes. Por eso, para nosotros, el Sínodo de los Jóvenes fue de gran importancia, porque nos ayudó a verificar nuestro carisma en favor del desarrollo de los jóvenes”.
“Un cristiano aislado es un cristiano en peligro”, dice Fétis, parafraseando a su padre fundador, Guillermo Chaminade. Y agrega: “La fe se vive en comunidad, por eso nuestra congregación está muy preocupada por formar comunidades de fe, comunidades de adultos. Algunas pertenecen a la Familia Marianista, como las Comunidades Laicales Marianistas, y otras se van formando en torno a la fe y luego se van compenetrando con el carisma”.
“María crea comunidad alrededor de su hijo”
“El pontificado del Papa Francisco es una gran oportunidad para la Iglesia, porque él está haciendo algo nuevo”, sostiene Fétis. Y prosigue: “Su deseo es ayudar a la Iglesia a ser más comprometida en su vida evangélica. Él viene a cambiar cosas que se vivieron a lo largo de los siglos de la Iglesia, pero que no son evangélicas, como ciertos cargos de poder o como ciertas formas de vida que no forman parte del Evangelio de Jesús”.
“Como religiosos –puntualiza–, tratamos de vivir una vida fundamentalmente inspirada por el Evangelio, y particularmente, inspirada por María. María tiene una manera particular de inspirarnos en la vida evangélica”.
Y afirma con certeza: “Para nosotros, marianistas, María es nuestra maestra. Ella nos ayuda a encontrar a Jesús. Ella tiene la particular facilidad de crear comunidades alrededor de su hijo”.
