En su último día de visita a Venezuela para constatar la situación ‘real’ del país suramericano, Michelle Bachelle, alta comisionada de las Naciones Unidas de derechos humanos–antes de su encuentro con Maduro en Miraflores– sostuvo una reunión, este viernes 21 de junio, con una comisión de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), encabezada por José Trinidad Fernández, secretario general y obispo auxiliar de Caracas, en la que entregaron un documento con un conjunto de peticiones, suscrito también por José Luis Azuaje, presidente y arzobispo de Maracaibo, Mario Moronta, obispo de San Cristóbal y primer vicepresidente, y Raúl Biord Castillo, segundo vicepresidente y obispo de La Guaira. Así la ha hecho saber el episcopado en su cuenta twitter.
Comisión de la Conferencia Episcopal Venezolana, encabezada por Mons. José Trinidad Fernández, Secretario General de la CEV, se reúne y entrega documento a Michelle Bachelet, alta comisionada para los DD.HH de la ONU https://t.co/KRl4f6QZjY pic.twitter.com/3bBPkembc1
— CEV (@CEVmedios) 21 de junio de 2019
Los prelados han pedido a Bachelet que en “su informe refleje el rostro real de lo que pasa en Venezuela, que permita señalar mecanismos para solucionar los problemas de fondo de lo que ocurre con nuestro pueblo”, en referencia al relatorio que la funcionaria presentará el próximo 5 de julio ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
“Agradecemos su presencia en Venezuela por la atención y el tiempo que ha dedicado a la escucha de las distintas organizaciones sociales del país, y consideramos su oportuno Informe ante la grave crisis que vive el pueblo venezolano”, han expresado.
Grave crisis humanitaria
En su petitorio, los prelados nuevamente han denunciado la situación de la grave crisis humanitaria que vive la población, sometida a situaciones extremas, entre ellas el crecimiento del suicidio, la falta de prosecución de estudios ante la deserción, por pobreza, falta de alimentación y de transporte, la precariedad alimentaria ante los altos costos, la grave situación de la salud pública que se traduce en la falta de medicina y las condiciones deprimentes de los hospitales, trayendo como consecuencia la reaparición de enfermedades que habían sido erradicadas.
Además “constatamos la calamidad la crisis eléctrica en toda Venezuela, con excepción de Caracas para dar la sensación de normalidad a quienes visitan el país” como también “la situación del agua que no llega a los hogares, debido a las fallas eléctricas”, han asegurado.
Riesgo en las fronteras
Bachelet –expresidenta de Chile y muy afín al fallecido Hugo Chávez– inició una visita al país el 19 de junio en representación de la ONU, desde entonces se ha reunido con altos funcionarios del régimen chavista, víctimas de la represión y el propio Juan Guiadó, presidente encargado.
En este sentido los representantes de la Iglesia venezolana han pedido también “el nombramiento de un equipo que en coordinación con los distintos entes del país, monitoree el informe y las recomendaciones que usted dará a conocer el próximo mes de julio y constatar las realidades al interior del país y en la fronteras”.
Respecto al tema fronterizo han señalado que la diáspora va en aumento, suscitando nuevas formas de esclavitud, entre ellas “la trata de personas, la prostitución, falta de respeto hacia la gente en las Alcabalas”.
Otro tema de preocupación para los obispos es “el aumento de la desnutrición infantil y el manejo de la mentira como que si fuera verdad” y por si fuera poco “el tema de la gasolina que no son horas, sino días enteros para abastecer los vehículos, en la zonas de fronteras”.
Temas fundamentales
Asimismo los obispos venezolanos han solicitado a la alta comisionada de la ONU poner sobre la mesa temas importantes como “el reconocimiento de las ONG´S, y la permisología necesaria para formalizar la entrada de insumos para la asistencia humanitaria, liberación de los presos políticos y la eliminación de las comisarias como centros de reclusión”.
“Que se eliminen las prácticas abusivas que violan los derechos humanos de los distintos grupos de seguridad del Estado (Servicio Bolivariano de Inteligencia, Fuerzas de Acciones Especiales), grupos irregulares como los colectivos que actúan con absoluta impunidad”, han dicho.
Elecciones libres
En el documento también se ha destacado el tema electoral, al respecto los prelados han pedido a Bachelet intervenir “en la restitución de los derechos electorales, políticos y económicos de la población, que permita a los venezolanos vivir en libertad, dignidad y progreso”.
La solución de fondo a la crisis de gobernabilidad está precisamente en la celebración de “elecciones libres y transparentes, con un nuevo CNE y una nueva revisión de la data del Registro Electoral. La salida es la elección de un nuevo Presidente y el reconocimiento de la Asamblea Nacional como ente elegido por el pueblo”.
Desesperanza: problema de salud pública
“La desesperanza es ya un problema de salud pública”, han comentado los obispos venezolanos, que advierten que “el índice de suicidio se ha cuadruplicado en el último año, ha aumentado la indigencia y los niños en situación de calle”.
Igualmente la Iglesia muestra preocupación ante la anomia social, que “se expresa en la impunidad estatal ante el delito y en la promoción de formas de defensas sea de forma armada o simbólica que crean brechas entre los mismos venezolanos”.
Por el bien común
Como es consabido en sus exhortaciones y comunicados, el episcopado venezolano le apuesta a la reconciliación y a la salida pacífica ante estos conflictos “a través del acompañamiento que hacen las distintas instancias eclesiales en la búsqueda de la reconstrucción del tejido social”.
“La crisis que vive el país hunde sus raíces en la corrupción y la impunidad ante los saqueos del erario público y no simplemente por las sanciones que se han hecho”, en referencia a las medidas sancionatorias recientes de EEUU, a lo cual señalan “Venezuela antes de estas sanciones ya estaba en una situación económica deprimente. La grave crisis humanitaria se resuelve si, los factores de poder buscan el bien común de todos”.
Foto: CEV