Los obispos españoles han aprovechado la jornada en la que tantas calles de pueblos y ciudades se engalanan con flores para verter, con motivo del Corpus Christi, Día de la Caridad, su mensaje más ecologista de los últimos tiempos, muy en sintonía con Ladauto si’ y en plena preparación del Sínodo Panamazónico del próximo octubre.
Un mensaje que suscriben los miembros de la Comisión Episcopal de Pastoral Social y en donde invitan a “purificar nuestra mirada”, en sintonía con el título que encabeza el texto, Y renuevas la faz de la tierra. Porque los obispos ofrecen 4 pistas para cambiar esa mirada para ser capaces, por un lado, de alabar la Creación y, por otro, de implicarnos en el cuidado de todas sus criaturas.
1.- Una mirada contemplativa y comprometida
Es la que los pastores reconocen con que hoy tenemos que mirar “el cielo y la tierra” para, de esta manera, “colaborar con Dios en la restauración de la belleza de la creación”, pues, como afirman, esta “está siendo maltratada, expoliada y sometida a la cultura del descarte”.
2.- Una mirada de asombro y entusiasmo
Esa es la perspectiva que los obispos consideran pertinente en estos momentos “para afrontar los desafíos que estamos viviendo y que se vislumbran en el horizonte, para que la humanidad reanude su camino con buen ánimo y mucho sentido común”.
3.- Una mirada misericordiosa
Para “descubrir y encontrar” a Dios “en todos los hombres y mujeres, sirviéndole en cada uno de ellos, de modo especial en los más pobres, frágiles y necesitados”, señalan en el mensaje.
4.- Una mirada que nos haga creíbles
En el Día de la Caridad, los obispos nos recuerdan que “la Eucaristía sin caridad se convierte en culto vacío” y, a la vez que agradecen la entrega de tantos voluntarios, piden que esa entrega “muestre una vida creíble en todo momento a los ‘heridos por la vida’: pobres; sedientos de Dios; transeúntes; emigrantes con sus adversidades; refugiados; familias desestructuradas; marginados; personas atrapadas y esclavizadas por las drogas, el alcohol u otras dependencias; la trata de mujeres en la esclavitud de la prostitución; las estrecheces por las que pasan los desempleados; ancianos solos; enfermos mentales; necesitados de compasión”.