En declaraciones a la Cadena Ser en la mañana de este lunes 1 de julio, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, se ha mostrado muy crítica con el nuncio papal, Renzo Fratini, quien ayer, en una entrevista con Europa Press, lamentó que el Gobierno ha “resucitado a Franco”.
De hecho, Calvo ha anunciado que el Ejecutivo socialista va a presentar hoy mismo una queja formal al Vaticano por la “injerencia” del nuncio, considerando que sus declaraciones son “improcedentes e inaceptables”, pues un diplomático “no tiene que entrar en los asuntos internos de un Estado”, y mucho menos en un tema “tan importante como es exhumar los restos de un dictador”.
En dicha entrevista, Fratini, que va a ser relevado de un modo inminente tras diez años de servicio en España, adonde llegó para suceder a Manuel Monteiro de Castro, rechazó el modo en que se ha llevado la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos, consiguiendo, a su juicio, una reacción contraria a la pretendida: “Resucitar a Franco”.
“Sinceramente –dijo–, hay tantos problemas en el mundo y en España. ¿Por qué resucitarlo? Yo digo que han resucitado a Franco. Dejarlo en paz era mejor. La mayoría de la gente, de los políticos, tiene esta idea porque han pasado 40 años de la muerte. Ha hecho lo que ha hecho, Dios juzgará. No ayuda a vivir mejor recordar algo que ha provocado una guerra civil”.
En la búsqueda de las intenciones que han llevado a Pedro Sánchez a acometer este proyecto, el representante del Papa en España percibe “motivos políticos”: “Está detrás una ideología de algunos que quieren de nuevo dividir a España”. Y es que, significativamente, se ha producido una visceral reacción por parte de un sector de la sociedad: “Se ha enaltecido mucho más [la figura de Franco] después de que se anunciara esto . Las visitas han aumentado, el problema ha regresado; mucha gente no sabía dónde estaba el Valle de los Caídos”.
Tras recordar que la Santa Sede mantiene una “posición neutral” ante “un problema que es más de la familia Franco y del Gobierno”, Fratini reconoció que ha tratado de “mediar” en la cuestión. Con todo, enfatizó que, en el caso de confirmarse la exhumación, el Pardo siempre sería una mejor opción que la catedral de La Almudena. Eso sí, sea cual sea el destino final de los restos del dictador, habrá que partir del “respeto siempre de los derechos y de la voluntad de los familiares”.
Sobre su juicio histórico hacia la figura de Franco, Fratini pidió ir más allá: “Algunos lo llaman dictador, otros dicen que ha liberado a España de una guerra civil, que ha solucionado un problema. No continuemos peleándonos sobre si tenía razón o culpa. (…) Es peligroso juzgar la historia con nuestra mentalidad de hoy porque podemos condenar a los inocentes o podemos exaltar a los culpables”.
Carmen Calvo no ha sido la única que ha criticado al nuncio. Su compañera en el Ejecutivo socialista, la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, ha tachado de “desafortunadas” e “inaceptables” sus declaraciones a Europa Press. Así lo ha afirmado en un acto en Cádiz, recalcando que, de este modo, Fratini no ha hecho sino “inmiscuirse” en “una cuestión interna de España” que, además, obedece “a una ley y a un mandato parlamentario”.
En un comunicado, Izquierda Unida (IU) ha clamado que el nuncio “se entromete en asuntos internos del Estado español, cuestiona leyes aprobadas por las Cortes Generales y vulnera a todas luces cualquier comportamiento diplomático que se le debía suponer por su cargo”. Con todo, “lo más sangrante es que el máximo representante del Papa en España cuestiona en dicha entrevista que Franco fuese un dictador”.
La portavoz del Consejo de Coordinación de Podemos, Noelia Vera, ha defendido que la exhumación de Franco del Valle de los Caídos “es una deuda con la memoria histórica del país”. Eso sí, ha defendido que cualquiera “puede opinar lo que quiera opinar”, “también desde la Iglesia”.
Desde Ciudadanos, su secretario general, José Manuel Villegas, ha coincidido con Fratini en que el Gobierno “igual puede acabar resucitando” a Franco, tras un año de pasos en falso en la cuestión, que aún no acaba de resolverse. Como ha asegurado el representante de la formación naranja, los representantes del Gobierno socialista están siendo “susceptibles”, y más “cuando las instituciones emiten opiniones sobre otros temas en los que sí coinciden con el Gobierno, y no les parece tan mal”.