El papa Francisco se ha pronunciado en Twitter sobre la muerte hoy, 11 de julio, de Vincent Lambert, tetrapléjico francés que llevaba 11 años en estado vegetativo. El hombre, de 42 años, moría esta mañana en el hospital de Reims, donde se encontraba hospitalizado y en el que se había procedido a la suspensión de su alimentación e hidratación desde el pasado 2 de julio.
Así, Francisco ha expresado su deseo de que “Dios acoja en sus brazos a Vincent Lambert”, de la misma manera que espera que la humanidad no construya “una civilización que elimina a las personas cuya vida consideramos que ya no es digna de ser vivida”. Y es que, como ha subrayado el Papa, “toda vida humana tiene valor”.
Estas declaraciones de Francisco vienen en consonancia con las hechas hoy, poco después de conocerse la noticia, por la Academia Pontificia para la Vida, quienes, también a través de Twitter, consideraban que el desenlace de la historia de Lambert es “una derrota para nuestra humanidad”.
Por su parte, el director interino de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, ha dicho a los medios de comunicación que el Vaticano ha recibido “con dolor la noticia”. “Rezamos para que el Señor lo acoja en su Casa y expresamos cercanía a sus seres queridos y a todos los que, hasta el final, se han dedicado a asistirlo con amor y entrega”, ha subrayado.
De la misma manera, Gisotti ha parafraseado a Francisco en cuanto al no caer “en la cultura del descarte”, algo que para el Papa ha preocupado especialmente durante todo el proceso que ha atravesado Lambert y que, para Francisco, ha sido similar al caso de Alfie Evans.