Encuentro y Solidaridad organiza, entre los días 1 y 4 de agosto, el curso ‘La persona no es negocio: hacia el fin de la trata’ en la Casa Emaús. De esta manera, coincide en la misma semana con la celebración, hoy, 30 de junio, del Día Mundial contra la Trata. “En Encuentro y Solidaridad promovemos una cultura de vida solidaria, y esto abarca todos los ámbitos, desde lo social hasta la política, la cultura y la educación”, apunta a Vida Nueva Corina Fuks, responsable del curso.
“Con estos principios que tenemos visto que hace falta crear espacios donde podamos, junto con otras personas, dar respuesta a los problemas que existen en el mundo y, uno de ellos, es la trata de seres humanos”, subraya. Y es que, una de las principales motivaciones de la organización es, precisamente, estar del lado de “los últimos”, quienes, a día de hoy, “son los esclavos del siglo XXI, las víctimas de trata”.
“Desde hace bastante tiempo estamos luchando por este tema, ya que en España es una realidad muy acuciante”, asevera Fuks. Por eso, estas jornadas formativas, que se integran dentro de los cursos de verano de Encuentro y Solidaridad, pensados para “involucrar a otros a cambiar la realidad”.
La formación está enfocada desde la perspectiva de la trata en España y en Europa y las formas en las que está más presente, que son la trata con fines de explotación laboral y sexual. “También incluimos dentro del curso la trata con fines de explotación reproductiva”, señala Fuks, es decir, lo que se conoce como vientres de alquiler. “Consideramos que, a pesar de no estar tipificado como trata, reúne las mismas características que esta”, ya que “se compra un bebé, se alquila el cuerpo de la mujer y, en definitiva, se está tratando a la persona como un objeto”.
“En la realidad que estamos viviendo ahora mismo en España, hay partidos políticos que, por intereses electorales, tienen un discurso favorable con respecto a este tema”, explica. Sin embargo, señala que “no informan a sus votantes de lo que hay detrás de este negocio”, por lo que la organización considera importante “incluir este tema para crear conciencia social de que se está tratando, por la vía legal, de incluir en España una nueva forma de explotación de la mujer”.
Por otra parte, la trata con fin de explotación laboral está presente en España en muchos sectores, como puede ser la agricultura y el servicio doméstico. “Lo consumimos diariamente, pero no solo en nuestro país, sino por los servicios que recibimos de otros países y porque hay empresas españolas que fabrican a través de subcontratas en otros países donde hay casos de trata”.
En cuanto a la explotación sexual, Fuks señala que España es el tercer país del mundo en demanda de prostitución. Por eso, en el curso va a recalcar que “la línea entre la prostitución y la trata se desdibuja, sobre todo porque la inmensa mayoría de las mujeres que ejercen la prostitución en nuestro país son migrantes que llegan a través de estas redes tratando de escapar de la pobreza”.
Para ello, además, contarán con el testimonio de Fiona Bradfoot, una de las ponentes, que es sobreviviente de trata con fines de explotación sexual y que salió de la prostitución cuando una prima, de 17 años y que también la ejercía, fue asesinada por un cliente.