Mañana arranca en Roma una nueva cumbre entre la Santa Sede y el país asiático para estrechar las relaciones diplomáticas
Una delegación oficial de Vietnam visitará la Ciudad del Vaticano el 21 y 22 de agosto para avanzar en el proceso de normalización de las relaciones diplomáticas, rotas desde mediados de los 70 por los comunistas del Viet Cong.
En el comunicado publicado por la oficina de prensa de la Santa Sede se subraya la posibilidad de que el cardenal secretario de estado, Pietro Parolin, visite el país comunista “en el futuro próximo”. Tal es la relevancia de la cita, que hasta Roma se ha desplazado el viceministro vietnamita de Relaciones Exteriores, To Anh Dung, que se reunirá con Antoine Camilleri, subsecretario vaticano de Relaciones con los Estados.
Se trata del octavo encuentro oficial de este tipo que se mantiene y, según el comunicado romano, se abordarán “algunos aspectos de la vida eclesial en el país, así como preguntas sobre el estado y la misión del representante pontificio residente en Vietnam”. O lo que es lo mismo, este foro podría ser la antesala al nombramiento de un futuro nuncio de la Santa Sede en Vietnam.
Tras la reunificación del país a partir de 1975 se nombró a un “representante pontificio no residente”, cargo que ocupa el arzobispo polaco Marek Zalewski, actual nuncio en Singapur.
Según el Informe de Libertad Religiosa de Ayuda a la Iglesia Necesitada, los cristianos en Vietnam representan el 8,7% de la población, lo que supone la segunda mayor población de católicos de Asia, por detrás de Filipinas.