La reconciliación para superar las divisiones y la protección del medioambiente serán las dos grandes ejes que marcarán el viaje que el papa Francisco realizará del 4 al 10 de septiembre a Mozambique, Madagascar y Mauricio. Será su segunda gira por el África subsahariana después de la que hizo en noviembre de 2015 a Kenia, Uganda y República Centroafricana.
“Uno de los temas será la reconciliación, la paz y la cultura del encuentro”, explicó este miércoles el nuevo director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, en su primera rueda de prensa tras su nombramiento el pasado 18 de julio. “El otro tema del viaje, que va ligado estrechamente al de la reconciliación, es el del cuidado de la creación. Son países con una riqueza natural extraordinaria”.
Bruni destacó cómo la grave deforestación de Madagascar está relacionada con los niveles de miseria que sufre el país, uno de los más pobres de África, y recordó los recientes ciclones Idai y Kenneth que han golpeado Mozambique, en particular la ciudad de Beira, en el sur del país, donde más de 800 personas murieron y cientos de miles se quedaron sin hogar debido al huracán Idai el pasado mes de marzo.
Francisco no visitará esa región por “problemas logísticos”, indicó el director de la Sala de Prensa de la Santa Sede. “La reconstrucción sigue en curso y un viaje del Papa supondría un peso ulterior”. Que no haya una etapa en Beira no significa que el Papa se olvide de los damnificados por las catástrofes naturales sufridas en Mozambique, a los que envió ayuda y que estarán muy presentes en sus intervenciones a lo largo del viaje.
Durante la semana que durará su visita a Mozambique, Madagascar y Mauricio, países que ya visitó San Juan Pablo II a finales de los años 80 del siglo pasado, con el final del colonialismo todavía muy presente, Francisco pronunciará 15 intervenciones. Utilizará el portugués en su estancia en territorio mozambiqueño y pasará al italiano en las otras dos naciones.
Los católicos son una minoría importante en los tres Estados a los que viajará el Papa. Suponen el 28% de la población de Mozambique y de Mauricio y el 34% de la de Madagascar. En este último país Francisco se encontrará con un compatriota, el misionero argentino Pedro Opeka, promotor de la llamada ‘Ciudad de la Amistad’ de Akamasoa, nacida sobre un basurero y donde viven 25.000 personas en viviendas dignas. Muchos de los vecinos trabajan en la cantera adyacente donde Francisco pronunciará una oración dedicada al trabajo.