La diócesis de París firma un acuerdo con la fiscalía para luchar contra los abusos

Este jueves, 5 de septiembre, por la tarde el arzobispo de París, Michel Aupetit, y el fiscal general de la capital francesa, Rémy Heitz, han firmado un protocolo de acuerdo para la lucha contra los abusos sexuales en el seno de la Iglesia. Es la primera vez en Francia que se firma un acuerdo de este tipo, centrado en la transmisión de denuncias sobre delitos sexuales al Ministerio Público en sintonía con las medidas internas que ya estaba aplicando la diócesis.

Comunicación fluida

Según el comunicado del obispado, esta medida “es una continuación de las acciones ya emprendidas desde hace varios años por la Diócesis de París”, y ahora garantiza “que todas las denuncias de delitos sexuales que parezcan probables, sean transmitidas al Ministerio Público de París mediante una alerta, sin que sea necesario que la víctima haya presentado previamente una denuncia”.

Las denuncias pueden referirse, precisa la diócesis, tanto a si son de carácter civil o penal, ya sean cometidas contra menores o adultos por parte de clérigos o laicos vinculados a cualquier entidad u organización relacionadas con la Iglesia Católica.

Este nuevo canal implicará una rapidez y sistematicidad para que el fiscal gracias a la colaboración diocesana puede identificar los delitos o desestimar las posibles dudas o ambigüedades. Por su parte, el fiscal ha designado a uno de sus adjuntos como magistrado de referencia en estos asuntos para que haya una vía siempre abierta.

Marco institucional

“Las descripciones serán tramitadas sin demora por la sección de menores del Ministerio Fiscal de París cuando los hechos denunciados se hayan cometido contra un menor o en el interior de una escuela, o por la sección encargada del enjuiciamiento público territorial cuando se hayan cometido contra un adulto”, señala la diócesis. Por su parte, el fiscal en sintonía con el código penal informará a la diócesis de las acusaciones y medidas contra personas de sus entidades, aunque no sean definitivas.

Para el obispo, “por primera vez en Francia, una fiscalía y una diócesis establecen sus relaciones en un marco institucional que permitirá reforzar la lucha contra los abusos sexuales respetando los derechos de todos y la presunción de inocencia”, declaró.