La Iglesia argentina sigue reclamando, en el medio de la campaña electoral

En este tiempo tan convulsionado para la sociedad argentina, los obispos aprovechan espacios y eventos, para dar a conocer la mirada de la Iglesia y pedir algunas soluciones, con el objetivo de colaborar con un más calmo clima social.

Un pedido reiterado

En el cierre de la jornada de pastoral social de la Arquidiócesis de Buenos, el primado de Argentina, Mario Poli, realizó un nuevo llamado para que se logre un gran pacto social. No es nuevo este pedido del cardenal. Ya, en el tédeum del 25 de Mayo, había propuesto un acuerdo social y político. “¿No será momento de ir hacia un gran pacto nacional con mirada amplia y generosa?”, se preguntó en aquella oportunidad.

Estas jornadas arquidiocesanas se realizan todos los años, y participan en ellas, muchos dirigentes sociales. Pero el contexto social del momento, por la crítica situación social y la proximidad de las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo el 27 de octubre, dieron a esta jornada un marcado tinte político. A través de cuatro paneles se escuchó la voz, tanto de empresarios, dirigentes pastorales y sociales, como también de políticos muy involucrados en las campañas electorales.

El cardenal ayer pidió diálogo, tal como lo había expresado Juan Pablo II en ‘Ecclesiam Suam’. “El diálogo debe tener claridad, afabilidad, confianza y prudencia”, dijo, y continuó: “cuando el diálogo se conduce así, se realiza la unión de la verdad con la caridad, de la inteligencia con el amor“.

“Para que la verdad dé sus frutos, tiene que dejar de ser tuya y dejar de ser mía. El diálogo hace surgir una verdad asombrosa, milagrosa. Saca de los interlocutores lo mejor de lo humano“, expresó Poli al final de la jornada, a la hora de las conclusiones.

El eslogan de campaña

Ante la visita del Presidente de la Nación y su esposa, a la provincia de Salta, en el marco de la festividad del Señor y la Virgen del Milagro, el Arzobispo Mario Cargnello, agradeció la visita. Al hacer uso de la palabra, si bien se mostró afable, le anticipó al Presidente:“voy a hablar de corazón a corazón”. Y continuó: “Ha venido a un buen lugar, a encontrarse con el Señor y Dios, que no hace las cosas mágicamente, sino que transforma el corazón y provoca la libertad”.

Durante la campaña electoral del 2015, Mauricio Macri motivó la lucha contra la pobreza, a través de un eslogan “Pobreza Cero”. Cargnello se lo recordó: “Cuando empezó usted dijo ‘voy a luchar por la pobreza cero’. ¿Qué puede decir Salta ahora?”.

Ante el incumplimiento manifiesto de ese eslogan, continuó: “Por eso Mauricio, has hablado de la pobreza, llévate el rostro de los pobres. Son dignos, son argentinos y son respetuosos y merecen que nos pongamos de rodilla delante de ellos. Vale para todos, hermano”.