El Equipo de teólogos asesores de la presidencia (ETAP) de la Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos (CLAR) se ha mostrado en sintonía de oración y comunión, a través de un comunicado, con el venidero Sínodo de la ‘Amazonía: Nuevos Caminos para la Iglesia y para una Ecología Integral’ a realizarse en Roma del 6 al 27 de octubre.
“Frente a esta hora histórica para la vida de nuestros pueblos, la Vida Consagrada latinoamericana y caribeña, quiere acercar el latir de nuestros territorios y comunidades originarias, como gesto de proximidad comunicativa que amplía la mirada y permite oír los latidos del corazón amazónico”, han dicho.
Para los especialistas de la CLAR “ya es la hora desde nuestra conversión pastoral, ecológica y sinodal” de una Vida Consagrada “reconciliada y en sintonía con la madre tierra y con todas las especies vivas” y “en comunión con todos los hombres y mujeres que se gastan sin egoísmos y sin reservas en el cuidado de la vida”.
Los teólogos y teólogas han destacado, de este evento sinodal, el proceso de escucha realizado a través de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM), el cual recogió “más de 80.000 voces, venidas de las riberas de los ríos amazónicos y de las selvas, de los pueblos y ciudades”, por lo cual “será un momento especial desde muchos puntos de vista, ya que reunirá voces de diversos contextos que se armonizarán en la experiencia del “caminar juntos y juntas”.
Además han recordado que estos aportes de las comunidades originarias han sido “valiosísimos para la construcción del Instrumentum Laboris”, porque “estas voces contienen el aliento de la Ruah divina que quiere hacer nueva todas las cosas, devolviendo a la Iglesia su vocación de sierva y signo del Reino, como se prefiguró en el Concilio Vaticano II”.
“Estar donde nadie quiere estar y con quien nadie quiere estar”. Es una de las líneas maestras del documento de trabajo del sínodo por el cual los consagrados del continente apuestan y sueñan, desde un servicio alternativo, profético, intercongregacional e interinstitucional.
“Ojalá no permanezcamos al margen de lo que sucede en la Amazonía, ni en sus muchos pueblos y culturas y reaccionemos proféticamente frente a su sistemática destrucción”, han expresado.
Por tanto para garantizar este proceso serán de mucha valía “las actitudes de escucha, participación y respeto en la diversidad” que desde la vida consagrada puedan darse especialmente en “una actitud orante, mediada por el diálogo, el discernimiento y la fraterna colaboración” que los lleve a asumir “un estilo de vida nuevo amparado en una conducta ética que se haga mística y profecía de lo que queremos ser y hacer”.
Foto: CLAR