El papa Francisco ha dejado este martes, 24 de septiembre, el Vaticano por unas horas para visitar por sorpresa la Comunidad ‘Nuovi Orizzonti’ (Nuevos Horizontes), situada a en Frosinone, a unos 90 km. al sudeste de Roma. El pontífice saludó, en concreto, a los residentes de la ‘Ciudadela Cielo’ de esta entidad italiana fundad en 1993 por la laica Chiara Amirante y que se dedica a apoyar a personas vulnerables, a través de centros de escucha y apoyo a la vida, hogares familiares y talleres para la integración laboral.
Un trozo de cielo
El pontífice estuvo acompañado en esta visita por el cantante Andrea Bocelli y fue recibido por la propia Amirante. A su llegada, Bergoglio pudo escuchar el testimonio de fe de algunos jóvenes de la comunidad. A ellos, de forma espontánea, el Papa les dijo que sus “historias son historias de miradas, tantas miradas” y que le habían “impactado” y les invitó a no perder la esperanza. “Habéis sido llamados, mirados, vencidos, acariciados: la caricia de Jesús”, les recordó.
No es la primera vez que Francisco se relaciona con la comunidad Nuevos Horizontes, el 8 de junio llamó por teléfono a la entidad que celebraba su 25 aniversario. También remitió un vídeo mensaje para mostrar su cercanía a los 3.000 voluntarios que celebraron la fiesta de Pentecostés en el pabellón de deportes de Frosinone.