El pitazo inicial de la Copa de Fe tendrá lugar hoy, 7 de octubre, en la diócesis de Chiquinquirá, ciudad mariana de Colombia, donde más de 600 sacerdotes del país y Latinoamérica se han dado la cita para participar en el evento deportivo más grande de la Iglesia colombiana creado por episcopado desde 2013 como nuevo areópago de evangelización y que este año llega a su sexta edición bajo el lema “en el camino de la renovación, acompaña a Colombia, María”.
Luis Felipe Sánchez, obispo de Chiquinquirá, anfitrión de la copa, ha expresado que “queremos llevar a la práctica la cultura del encuentro a la que nos ha convocado el papa Francisco”, porque para Chiquinquirá representa una bendición de Dios que “se va a ser presente en nuestra jurisdicción, en la fraternidad sacerdotal y demostrar que a través del deporte es posible construir espacios de paz”.
En honor a la Chiquinquirá
Para Elkin Álvarez, obispo auxiliar de Medellín y secretario general del episcopado, “la Conferencia Episcopal quiere hacer presente, tanto en el corazón de los feligreses de esta diócesis como en la comunidad católica de todo el país, la profunda devoción mariana y la alegría nacional con motivo de los cien años de la coronación de la imagen de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá como reina y patrona de Colombia.”
“Porque nosotros los sacerdotes queremos ser tus amigos, reencontrarnos, nos veas como seres humanos que también jugamos y tenemos momentos de ocio, queremos sencillamente transmitir a Cristo en una cancha de fútbol”, ha dicho el sacerdote Jaime Marenco, director de comunicaciones de la CEC, quien indicó que el torneo finalizará este 11 de octubre.
Una agenda muy completa
Serán 32 equipos despuntando la copa en estos 5 días. Entre los países invitados se encuentran México y Ecuador. Aparte de la agenda deportiva, tanto los participantes nacionales como internacionales compartirán espacios de espiritualidad con la celebración mariana por el centenario de la coronación de la Virgen de Chiquinquirá y un compartir fraterno en torno a la cultura y tradiciones de la ciudad.
Además el obispo de Chiquinquirá ha agradecido a los padres dominicos todo el apoyo brindado por la organización de este evento y a los presbíteros visitantes “los declaramos Peregrinos de Honor de la Reina de Colombia. Al visitar su Santuario, la Virgen recibirá su Proyecto de Vida Sacerdotal y les concederá la Gracia especialísima de la Indulgencia Plenaria. Acepten nuestras fervientes oraciones por cada uno de ustedes”.
Foto: CEC