Entre las múltiples expresiones de la región amazónica que cohabitan con la ‘Ciudad Eterna’ durante estos días de Sínodo Panamazónico, la exposición ‘Frágil Amazonía’, de la fotoperiodista española Ana Palacios, representa una de las mayores apuestas de CIDSE, en colaboración con la Red Eclesial Panmazónica (REPAM), y cofinanciada por la Unión Europea.
Ana Palacios, fotoperiodista española / Marta Isabel González – CIDSE
CIDSE es “una familia de organizaciones católicas en pro de la justicia social”, como la define Josianne Gauthier, su secretaria general, integrada por 18 instituciones europeas y norteamericanas. La muestra fotográfica inaugurada el 7 de octubre, en la Casa Internazionale delle Done, en Roma, hace parte del ecosistema de actividades que cobija ‘Amazonía: Casa Común’.
“La idea surgió directamente desde CIDSE y REPAM –detalla Ana Palacios. Ellos me llamaron para participar en un viaje de medios de comunicación a la zona de la triple frontera [amazónica], y me hicieron la propuesta no solo de tratar de hacer difusión de esta temática en distintos medios de comunicación –ya que soy freelance–, sino que además me propusieron hacer una exposición del tema, y yo acepté encantada”.
Entre la vulnerabilidad y el abuso
La exposición consta de 12 fotografías (seis de 110 cm, tres de 90 cm y tres de 60 cm) donde se evidencia que “la fragilidad está latente”, explica la artista, “porque describen los retos y desafíos que viven los habitantes y pueblos originarios de estos territorios” y, particularmente, “la situación en la que actualmente se encuentran, de fragilidad, vulnerabilidad e incluso de abuso”.
Inauguración de la exposición fotográfica ‘Frágil Amazonía / Raúl Moreno – CIDSE y REPAM
La infancia, la mujer y las tradiciones de los pueblos originarios, así como su soledad y aislamiento, marcan el trabajo de Ana Palacios, donde también están representados algunos acuciantes clamores como la trata de personas, el narcotráfico, la contaminación de los ríos, los monocultivos, la minería ilegal, la deforestación y los incendios, entre otros.
En este sentido, la secretaria general de CIDSE ha ponderado que “a través de esta exposición y sus imágenes, podemos escuchar las voces de la Amazonía y unirnos a ellas”. Es lo que los visitantes a la Casa Internazionale delle Done –no solo los participantes del Sínodo, sino toda la ciudadanía, en general– encontrarán hasta el 27 de este mes.
¡Todos a cuidar la ‘casa común’!
Por supuesto, la exposición fotográfica, también representa, en buena medida, los horizontes que estimulan la misión de CIDSE de cara al imperativo de la ecología integral y el cuidado de nuestra ‘casa común’, como detalla Chiara Martinelli, consultora de CIDSE y responsable del área sobre cambio climático:
- “Escuchar a las comunidades que viven en la región amazónica, así como en otras regiones del mundo. Aprender de sus prácticas, su espiritualidad y su relación con la naturaleza, como posibles vías sostenibles para abordar el cambio climático y la injusticia”.
- “La Amazonía debe ser un ejemplo emblemático de un planeta que llora, así como una inspiración para una vida sostenible. La Amazonía es el hogar de muchos defensores de los derechos humanos y del medio ambiente, mujeres y hombres que dieron y están dando su vida por el cuidado del planeta, el cuidado de la comunidad y los territorios”.
- “Urgencia: la Amazonía nos está mostrando que nuestra ‘casa común’ ya no lo aguanta más esta situación. Y se está mostrando cuán fuerte y profundo es el grito de la Tierra y el grito de los pobres. Necesitamos mirar este grito como un único grito, y responder a él con acciones urgentes y objetivos ambiciosos”.
- “Conversión ecológica para responder a esta crisis, para dar vida a la ecología integral en las acciones cotidianas y concretas (…). Una conversión que podría impulsar un cambio político que permita que un mundo más justo y sostenible florezca para todos”.
Fotos: Marta Isabel González y Raúl Moreno.
