Para la ministra de Justicia, Dolores Delgado, vivimos en una “sociedad abierta, plural e inclusiva y hay que trabajar para que siga siéndolo. No podemos dar un paso atrás a la tolerancia y al enriquecimiento por la suma de lo que es diferente”. Prueba de ello es que, según explicó, el 20% de los lugares de culto en España pertenecen a religiones minoritarias.
Así lo ha manifestado durante el acto con motivo del XV aniversario de la Fundación Pluralismo y Convivencia, organismo estatal responsable de la interlocución activa de las confesiones religiosas, especialmente las minoritarias con los poderes públicos.
Ni un paso atrás
Para la titular de Justicia, esta convivencia “no se puede ver amenazada por ningún discurso. No son admisibles los discursos de odio. No vamos a dar un paso atrás ni nos va a frenar ningún totalitarismo”. “Hay palabras que representan el espíritu de esta fundación: diálogo, cooperación, igualdad y sociedad civil”, añadió, defendiendo el trabajo de la entidad.
“Hace tres años los líderes de las confesiones religiosas firmaron el llamamiento de Asís, una vigorosa llamada por la paz”, subrayó la ministra sobre el encuentro promovido por el Papa Francisco, y destacó de aquel documento el deseo “de impulsar el ejercicio de la libertad para la vertebración de una convivencia pacífica sobre la diversidad religiosa”.
Laicidad del Estado
“Hemos pasado de una dictadura nacional catolicista a una Constitución que ha abogado la laicidad del Estado que reconoce la libertad de culto”, apreció a la vez que señaló cómo la Carta Magna insta a trabajar por defender la diversidad y “seguir impulsando un marco de convivencia para que las creencias no sean causa de discriminación”.
La presidenta de la Fundación, Inés Mazarrasa Steinkuhler, destacó que “hay que sumar y seguir avanzando para romper barreras para que las creencias no sean causas de discriminación”. En este sentido, no solo subrayó el papel de la fundación y de los poderes públicos, sino de los investigadores, de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. “Es un esfuerzo colectivo”, aseveró.
Remover barreras
El eurodiputado y ex ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, subrayó la importancia de la actual Ley Orgánica de Libertad Religiosa, “una norma razonable” en tanto que permitió “remover barreras de discriminación en relación con la igualdad en la libertad de creencias” y que ha permitido acabar con “desagravios en algunos casos groseros”.
Además, recordó que la ley salió adelante con la resaca de los atentados del 11-M: “Fuimos capaces de enfrentar el yihadismo sin menoscabar nuestros valores ni dañar a ninguna confesión religiosa”.
En este sentido, aplaudió el “diálogo constructivo” fraguado gracias a la Fundación Pluralismo y Convivencia, en favor de las “comunidades religiosas, no solamente con la Iglesia”. En este sentido, hizo un llamamiento a reconocer el actual pluralismo religioso que vive nuestro país, “que enriquece la convivencia y que haremos bien en acostumbrarnos porque ha llegado para quedarse”.