Los Heraldos del Evangelio ya han recibido la visita de cardenal Raymundo Damasceno Assis, enviados por la Santa Sede como comisario pontificio. Un total de 1.000 miembros de la institución participaron en la misa celebrada este miércoles en la basílica de Nuestra Señora del Rosario en Caieras (Brasil) por el propio purpurado y su asistente, José Aparecido Gonçalves de Almeida, obispo auxiliar de Brasilia.
“Queridos hermanos y hermanas todos en Nuestro Señor Jesucristo. Es con gran alegría que estoy aquí visitando esta comunidad, esta casa. Fui nombrado por la Santa Sede para justamente colocarnos al servicio de los Heraldos”, explicó el arzobispo emérito de Aparecida y presidente de la Conferencia Episcopal Brasileña al comienzo de su homilía.
Asimismo, Damasceno indicó que esta intervención “es un signo del amor y la ternura de la Iglesia hacia esta familia religiosa”. Y añadió: “La Iglesia, como un signo de predilección hacia esta familia religiosa, justamente nombró al comisariato no como intervención o castigo, como muchas veces aparece en las redes sociales”.
Del mismo modo, el purpurado señaló que “la Iglesia quiere colaborar con los Heraldos para que sean cada vez más fieles a su carisma, a su misión en la Iglesia de Nuestro Señor Jesucristo. Es por eso que estamos aquí con este espíritu de servicio”, aseguró. Antes de concluir su alocución, el purpurado invitó a todos los presentes a buscar la santidad.
El Vaticano decidió intervenir a los Heraldos del Evangelio tras la visita apostólica iniciada en 2017. La asociación internacional, a la que pertenece la Sociedad de Vida Clerical Apostólica Virgo Flos Carmeli y la Sociedad de Vida Apostólica Femenina Regina Virginum, contará desde ahora con la supervisión del cardenal brasileño.
Las motivaciones de la visita apostólica y ahora de la decisión de enviar un comisario pontificio responden a deficiencias en el estilo de gobierno, la vida de los miembros del Consejo, el cuidado pastoral de las vocaciones, la formación de nuevas vocaciones, la administración, la gestión de las obras y la recaudación de recursos, según ha podido saber esta revista.
La decisión de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCSVA), cuyo prefecto es el también cardenal brasileño Joao Braz de Aviz, fue comunicada el pasado 28 de septiembre después de recibir la aprobación del papa Francisco.
El 23 de junio de 2017, la CIVCSVA, junto con el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, comenzó una visita apostólica a la institución fundada por el prelado Joao Scognamiglio Clá Dias, tras la que ha decidido nombrar un comisario, que contará con la asistencia de Aparecido y de Marian Ambrosio, superiora general de las Hermanas de la Divina Providencia.